Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer
Artículo de portada

Consciente del propósito del Amor divino

Del número de mayo de 2015 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana

Original en portugués


Hace unos años, a principios de unas muy deseadas vacaciones, que habían requerido meses de planeación, inversión económica y mucha expectativa, noté que tenía un bulto en la parte superior de una de mis orejas. Era doloroso, y yo tenía miedo de que esa condición no me permitiera disfrutar de mi tan esperado viaje.

Sin embargo, después de pensar una y otra vez en esa situación por un tiempo, sentí que era hora de callar y reconocer que vivimos eternamente en la atmósfera del Espíritu, no de la carne o la materia. Esta atmósfera del Espíritu es armonía pura y en ella no hay espacio para el dolor.

Recordé este pasaje de la Biblia: “Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que estamos en el cuerpo, estamos ausentes del Señor (porque por fe andamos, no por vista); pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al Señor” (2º Corintios 5:6–8). Estar “confiada”, sabiendo que reflejo la sustancia del Espíritu, me permitió no identificarme con el dolor y estar, por así decirlo, “ausente del cuerpo”, para dejar de identificarme a mí misma con el falso concepto de que mi identidad es corpórea y reconocer que la armonía es inherente a mi verdadera y única identidad, la cual es espiritual y perfecta.

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / mayo de 2015

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.