Las palabras de Ciencia y Salud por Mrs. Eddy que han sido más curativas para mí son las de “la declaración científica del ser” que se encuentra en la página 468. Cuando empezaba a estudiar este libro de texto sentía cierta rebelión contra las palabras: “No hay vida, verdad, inteligencia ni substancia en la materia.” Pero al seguir estudiando se me reveló la verdad que encierra esa declaración, y comprendí que en y de por sí la materia no tiene vida, puesto que Dios es Todo. En la Christian Science aprendemos que la creación verdadera con toda su belleza es una idea, expresión o reflejo de la amorosa Mente creativa que es Dios. Por tanto, la substancia verdadera es la realidad del Espíritu. Doy gracias yo por esta comprensión.
Comencé a estudiar conscienzudamente la Ciencia después de haber oído una conferencia sobre Christian Science. No tardé en dejar de fumar y de tomar vino con la comida. Luego me hice miembro de una Sociedad de la Christian Science y pronto después de La Iglesia Madre. Hice eso porque ya había hallado que la Christian Science enseña el modo verdadero de vivir y nos hace entender más claramente las enseñanzas del Ejemplificador del camino, Cristo Jesús.
Aunque no era salud lo que yo buscaba, quedé curada de disenteria amebia que había sufrido por más de veinte años. Ya vencido el temor, pude disfrutar de legumbres verdes y de fruta, de las que me había abstenido por creer que me hacían daño.
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