Todo lo que Dios hace, incluido cada uno de nosotros, existe como una idea en la Mente divina. Como el amado linaje de nuestro Padre-Madre Dios somos atendidos y bendecidos para siempre, y habitamos en “el lugar secreto del Altísimo”.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!