Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Sanada en la iglesia misma

Del número de enero de 2017 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana

Publicado originalmente en el Christian Science Sentinel del 24 de octubre de 2016.


Las palabras de Cristo Jesús siempre eran muy claras, precisas y poderosas. Esto se debe a que expresaba la palabra de Dios. “¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras” (Juan 14:10).

Oro con humildad para permitir cada vez más que la palabra de Dios efectúe la curación en mi práctica diaria, como Jesús nos enseñó. Comprender el poder de la palabra de Dios me ha ayudado a silenciar las sugestiones mentales y las dudas que me vienen al pensamiento. También me ha sanado varias veces estando en la iglesia misma, durante el servicio religioso; he tenido curaciones de resfriados, tos, fatiga, una sensación de enorme responsabilidad, tristeza, y otras dificultades. 

Un día visité a una amiga en otra ciudad. Mientras caminaba por la ciudad, tropecé en la acera y me lastimé el pie. El dolor era intenso, y solo pude continuar caminando lentamente, rengueando. Trataba de orar, pero no lograba superar el sentimiento de que estaba lastimada. 

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más en este número / enero de 2017

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.