Ya sea que nos demos cuenta o no, la Iglesia nos está sanando. Más que un edificio o un cuerpo de personas, la idea de la Iglesia verdadera está fundada en la bondad y el amor transformador de Dios, y lo incluye todo, abraza a todos en todas partes.
Ten en cuenta que la gente del mundo tiene gran número de rostros individuales. La Iglesia también puede tener muchos “rostros” y manifestaciones. Una iglesia ciertamente puede ser un grupo de personas comprometidas con el amor común de Dios que disfrutan reunirse en persona para compartir su crecimiento espiritual, explorar la inspiración divina y apoyarse mutuamente. Jesús describió dicha iglesia de esta manera: “Donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” (Mateo 18:20).
Si bien, los edificios de la iglesia, y los miembros organizados para trabajar juntos con eficiencia al servicio de Dios y la humanidad, ciertamente siguen siendo extremadamente pertinentes, ¿existen otros enfoques para reunirse en el nombre de Cristo? Últimamente, las personas se han estado congregando en reuniones de la iglesia en línea, sintiéndose fácilmente fortalecidas e inspiradas por el Cristo, la Verdad, que brilla con tanto resplandor “en medio de ellos”. Un servicio religioso o reunión de testimonios, una conferencia o clase de la Escuela Dominical, un canto de himnos o podcast en vivo en línea pueden representar toda la sustancia y el espíritu de cualquier reunión en persona.
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