Me desperté en la noche con mucha irritación debido a un proyecto de trabajo en el baño en casa que estaba estancado. Y lo que era aún más desalentador, ahora estaba resfriada.
A la mañana siguiente, como no me sentía mejor, recurrí a Dios en oración en busca de inspiración para calmar la irritación que sentía. Sabía que eso sería clave para resolver el estancamiento. He aprendido este enfoque para resolver problemas mediante la práctica de la Ciencia Cristiana, y está al alcance de cada uno de nosotros.
La Ciencia Cristiana enseña que Dios es Amor, y el Amor está siempre presente, absolutamente en todas partes para ayudar en lo que sea necesario; ya sea una dolencia física, un trastorno emocional o cualquier otro problema. El Amor divino nos ha creado a todos capaces de escuchar y oír la dirección de Dios y encontrar curación, bajo toda circunstancia. Así que me quedé muy callada y escuché. Lo que me vino suavemente fue esto: