Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer
Original Web

LA CIENCIA DEL CRISTO

De El Heraldo de la Ciencia Cristiana. Publicado en línea - 19 de diciembre de 2013

Publicado originalmente en el Christian Science Journal de Junio de 1956


La Ciencia Cristiana fue descubierta por Mary Baker Eddy en la última parte del siglo XIX. Durante la primera mitad del siglo XX, destacados científicos materiales comenzaron a apartarse de los antiguos conceptos concernientes a la materia y al llamado universo material; el pensamiento humano estaba cediendo a los eternos impulsos de la Verdad. El inspirado descubrimiento de la Sra. Eddy era Ciencia pura, pues en ella estaban las pruebas de la verdadera sabiduría, simplicidad y probabilidad: la Ciencia del Cristo, que fuera practicada en Galilea por el más grandioso Científico que haya vivido jamás, hace casi dos mil años.

En el Evangelio de San Juan dice que si se escribieran todas las cosas que hizo Cristo Jesús, el mundo entero no podría contener los libros que las registrarían. ¡Qué riqueza de sabiduría cayó en oídos torpes y cuánto tiempo ha tomado para que el camino de la investigación erudita nos guiara nuevamente a las palabras del Maestro! Pero ahora el mundo ha llegado a ese nivel de progreso espiritual donde puede conocer y probar la Ciencia pura, la idea verdadera de Dios, el hombre, y el universo. Desde qué vastos horizontes de visión espiritual habrá surgido esta declaración que Jesús dijo a sus discípulos: “Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar. Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad” (Juan 16:12, 13). Aquí está la profecía de que la totalidad de la sabiduría debe ser la Ciencia del Espíritu, no de la materia.

Es sólo a medida que los hombres se sientan a los pies del maestro Metafísico que pueden aprender la Ciencia verdadera y apoyar su comprensión con evidencias. Jesús trajo a la tierra el conocimiento de que el universo es creado espiritualmente, conocimiento que existía antes del principio del tiempo, y que abrió una perspectiva de la existencia que va más allá del horizonte físico. No exploró el llamado reino de la materia en la tierra o en los cielos para explicar las leyes de la creación, sino que habló y trabajó a partir del conocimiento que tenía con Dios antes de que el mundo fuera. Jesús profundizó la obra de Dios mediante la sabiduría de Dios.

Iniciar sesión para ver esta página

Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!

Para explorar más contenido similar a este, lo invitamos a registrarse para recibir notificaciones semanales del Heraldo. Recibirá artículos, grabaciones de audio y anuncios directamente por WhatsApp o correo electrónico. 

Registrarse

Más artículos en la web

La misión del Heraldo

 “...para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.