P: El otro día apareció una foto en mi teléfono. Eran… las partes privadas de un hombre. Yo ni siquiera conozco a ese hombre, y por supuesto que no quería ver eso. Pero ahora no puedo borrar esa imagen de mi cabeza. Ayúdame.
Todd Herzer: Soy el padre de dos hijas y, lamentablemente, conozco demasiado bien este tipo de situaciones. Y espero que haya un adulto en quien puedas confiar y contarle lo que te ha sucedido; aunque no tengas ninguna evidencia de que ocurrió, porque era un “snapchat” (una foto y mensaje que se autodestruyen), por lo que ya desapareció. Nada respecto a un hombre que haga eso es correcto o está bien.
Deborah Huebsch: También es comprensible que no te sea fácil borrar esa imagen de tu pensamiento. Yo sé lo que se siente, porque tuve una experiencia, cuando tenía poco más de veinte años, en la que fui testigo de algo perturbador de lo que me costó liberarme.
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