Dios es el único poder. Hace poco tuve una experiencia que me recalcó esta verdad, al proporcionarme evidencia de que Dios gobierna todos los aspectos de Su creación.
Un domingo por la noche, me encontré con una amiga para cenar, y mientras estacionaba comentó: “Tengo un problema con mi auto, pero no voy a arreglarlo todavía porque Mercurio está retrocediendo”.
Me reí y pensé: “¡Qué extraña razón para no arreglar tu auto!”. Tuvimos una linda cena, y no pensé más en ello.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!