En junio de este año, La Iglesia Madre celebró su Asamblea Anual mediante una transmisión por Internet desde Boston. Lo que impulsó esta reunión fue el renovado llamado a cada uno de nosotros para que consideremos profundamente nuestro propio compromiso con la curación y con el desarrollo espiritual, la regeneración y el amor desinteresado que sustenta toda curación verdadera.
No tenemos que mirar muy lejos para darnos cuenta de cuánto necesita el mundo la luz sanadora de la Ciencia Cristiana. No necesita tanto las palabras de esta Ciencia, como nuestra oración individual y silenciosa por el mundo y nuestra demostración diaria de la Ciencia Cristiana.
Cada vez que oramos por el mundo y discernimos espiritualmente la consumada unicidad de la Mente divina que gobierna todas sus ideas universalmente, producimos un impacto en el mundo. Además, cada curación que tenemos —destruyendo la enfermedad, el pecado, la escasez o el pesar— tiene un efecto que va más allá de nuestra propia vida.
Nuestras oraciones por el mundo, así como nuestras propias curaciones, ayudan a leudar más extensamente el pensamiento humano. Esto se debe a que la inspiración que obtenemos de la oración y la curación, se produce mediante la actividad transformadora del Cristo y del Espíritu Santo. El Cristo es la Verdad que habla universalmente a los corazones receptivos en todo rincón del mundo, revelando la omnipotencia de Dios y la perfección del hombre. El Espíritu Santo es el espíritu de Verdad, la Ciencia divina; las leyes de Dios que operan universalmente para transformar, redimir, purificar y sanar.
Gracias a la actividad del Cristo y del Espíritu Santo, podemos confiar en que nuestras oraciones serán eficaces en el mundo, donde quiera que sea necesaria su eficacia. Y nosotros también experimentaremos progreso y curaciones en nuestra propia vida.
En este número de El Heraldo, encontrarán varias páginas dedicadas a la Asamblea Anual y su enfoque en la curación. La reunión fue doblada al español, de modo que pueden ver el video completo en el sitio Web de La Iglesia Madre, en http://christianscience.com/spanish/member-resources/annual-meeting. Confiamos en que sentirán, como nosotros, la sinceridad y el amor con que nos fue impartido este importante mensaje a todos nosotros.
Con afecto,
David C. Kennedy
Redactor
