Originales Web
Cuando se trata del Espíritu, no tenemos que esperar para recibir la herencia que “el Padre de las luces” nos está dando libremente momento a momento.
Original en español
Lamenté no poder atender a los estudiantes y maestros ese día. Pero estaba en pleno trabajo de oración; negando cualquier cosa desemejante a Dios y embebiendo las palabras del Padre Nuestro.
El practicista afirmó de inmediato que sabíamos que mi lugar correcto estaba determinado por Dios, no por una persona. También me recordó que Dios es la única causa, que Él causa solo el bien, y que, por lo tanto, yo debo estar en el lugar correcto, en el momento correcto, haciendo el trabajo correcto con la recompensa correcta.
A medida que sentía la verdad del amor de Dios que todo lo incluye, el dolor y la enfermedad fueron disminuyendo hasta que finalmente desaparecieron. ¡Estaba libre!
Todo lo que realmente tenemos está ahora manifestando el resplandor de la bondad siempre presente e ilimitada de Dios. Por lo tanto, el hombre es la expresión natural de la fuerza, la energía, la vivacidad, la prosperidad, la eficacia, la motivación, la agudeza, el movimiento y el bienestar.
Necesitamos resistir la tentación de comparar a Dios con cualquier cosa humana o de usar a Dios como una especie de “botones cósmico” al que invocamos solo cuando necesitamos ayuda.
Podemos confiar con calma y humildad en que Dios proveerá a la humanidad con vigilancia y sabiduría oportuna para la acción correcta. Las entidades gubernamentales de todo el mundo están tomando medidas para garantizar la transparencia en el desarrollo y la aplicación de la IA.
Llega un punto en que el pensamiento inquisitivo se vuelve de los sentidos materiales a la Mente divina y sus infinitas capacidades y el sentido material, limitado o falso de la inteligencia es absorbido por lo divino.
Original en español
Un mensaje escrito en la pared de la Sala de Lectura llamó mi atención: “El Amor divino siempre ha respondido y siempre responderá a toda necesidad humana” (Ciencia y Salud, pág. 494). El domingo siguiente mis dos hijas y yo, asistimos a la Iglesia de Cristo Científico local por primera vez y con el tiempo, me convertí en miembro. También encontré curación.
Estoy agradecida por la amorosa inteligencia que Dios me brindó mientras trataba de comprender y responder al mal uso de la inteligencia artificial.