Estoy muy agradecido por la experiencia que relataré a continuación, pues me ha probado que tal como dice Mrs. Eddy en la página 66 del libro de texto de la Ciencia Cristiana, Ciencia y Salud, “Las pruebas son señales del cuidado de Dios.”
Una mañana al despertar hallé que apenas podía mover la pierna derecha. Cuando la movía sentía mucho dolor. Finalmente, todo el lado derecho comenzó a dolerme, y me era muy penoso caminar.
Entonces recordé esta frase que aparece en la página 283 del libro de texto: “La Mente es la fuente de todo movimiento, y no hay inercia que demore o detenga su acción perpetua y armoniosa.” Y en la página 199 leemos lo siguiente: “Los músculos no obran de por sí. Si la mente no los mueve, se quedan inmóviles.” Oré apoyándome en estas palabras y afirmando que el dolor es una ilusión de los sentidos materiales. Al aferrarme a estas verdades científicas sané completamente en muy poco tiempo.
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