Todo Científico Cristiano se siente agradecido por las bendiciones que la Ciencia le aporta y por el constante poder protector que ofrece esta religión. Cuando aplica sus enseñanzas, es capaz de demostrar cuán practicable es la Ciencia Cristiana [Christian SciencePronunciado Crischan Sáiens.].
En el año 1958 tuve la oportunidad de vivir en Alemania y trabajar allí durante cinco meses. Viajé extensamente por automóvil y por tren y visité nueve grandes ciudades.
Durante el verano, mi compañera y yo trabajamos y vivimos seis semanas en un campamento alemán para jóvenes junto con otros seis norteamericanos que profesaban diversas religiones ortodoxas. La comida que nos daban en el campamento era muy diferente a lo que había estado habituada a comer. Muy pronto, el ir al comedor se convirtió en una verdadera tortura. Luego tuve que guardar cama durante diez días a causa de una severa inflamación a la garganta, acompañada de una persistente tos que me tenía bastante preocupada.
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