A los miembros de La Iglesia Madre reunidos aquí en Boston, la Junta Directiva de la Ciencia CristianaChristian Science: Pronunciado Crischan Sáiens. les extiende una cordial y afectuosa bienvenida. A nuestros miembros en otros países y a los pueblos de todas las naciones nuestra Iglesia les envía un saludo asegurándoles que es su continuo propósito cumplir con la promesa hecha a la humanidad de predicar el evangelio, reformar al pecador, sanar al enfermo.
La dirección ejercida por Nehemías en la reconstrucción de la muralla de Jerusalén fue de gran inspiración para sus seguidores. Nehemías estaba haciendo algo más que restaurar una muralla. Estaba afirmando la integridad de Jerusalén — su carácter, su fortaleza, su vitalidad y su destino.
Ahora, en los comienzos del segundo siglo de la Ciencia Cristiana, La Iglesia Madre, con la ayuda de sus miembros y de las iglesias filiales, ha iniciado un programa de construcción destinado a satisfacer las necesidades de un mundo confrontado por cambios. La Iglesia Madre está haciendo algo más que erigir edificios. Está testificando de la integridad de la Iglesia, la “Iglesia” definida por nuestra amada Guía, Mary Baker Eddy, en Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras (pág. 583) como “La estructura de la Verdad y el Amor; todo lo que descansa en el Principio divino y procede de él”.
