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Desearía expresar mi gratitud...

Del número de julio de 1962 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Desearía expresar mi gratitud por la Christian Science
Nombre que Mary Baker Eddy dió a su descubrimiento (pronunciado Crischan Sáiens). La traducción literal de estas dos palabras es “Ciencia Cristiana”. y en especial por la curación de un pie infectado. La curación fué el resultado de la cirugía mental, que tomó lugar mediante la aplicación de la Verdad, tal como la comprendemos en la Christian Science.

Una mañana desperté con dolor y molestia a un pie. Lo tenía hinchado e inflamado y me era muy difícil caminar. Tenía un bulto sobre la parte superior, que se hizo cada vez más grande durante el curso del día. No podía calzarme, de modo que tuve que ponerme una zapatilla, e hice lo posible por atender a mis asuntos como de costumbre.

Al verme cojear, mis amigos, bien intencionados por cierto, expresaron temores de que si no consultaba a un cirujano esta condición podría tener graves consecuencias para mí. Siendo yo un devoto estudiante de la Christian Science y habiendo experimentado tantas curaciones en el pasado al aplicar esta Ciencia, no vacilé en apoyarme enteramente en el poder sanador de Dios. En razón del gran temor expresado por parte de mis amigos, le pedí ayuda a un practicista de la Christian Science.

Para este tiempo el pie y parte de la pierna se hallaban muy hinchados y me vi forzado a guardar cama. Estaba viviendo en un club para hombres, y como me servían las comidas en mi pieza, pronto se supo que estaba enfermo. No obstante, estaba tan convencido de la omnipresencia de Dios y sentía su presencia tan profundamente, que me rehusé a reaccionar al temor que me rodeaba. Percibía que mi curación no dependía de que estuviera en un cierto lugar, pero que como hijo perfecto de Dios podía recibir Su amor y Su ayuda justo donde me encontraba.

La practicista vino a verme a la noche siguiente, y juntos oramos y hablamos de la bondad de Dios. Se me hizo muy claro que en razón de que Dios es perfecto y el hombre es Su imagen y semejanza, el hombre al reflejar a Dios es perfecto. Percibí que el sentido falso del hombre, el ser mortal, no es la imagen de Dios, que es Espíritu, y que no importaba lo que aparentase tomar lugar con el hombre falso llamado un mortal. Comprendí además que el hombre a la imagen de Dios no puede verse sujeto a la infección, al envenenamiento, la hinchazón o la enfermedad; de modo que necesitaba ser sanado de nada más que del concepto falso que había estado albergando respecto al cuerpo.

A medida que la practicista silenciosamente afirmaba la verdad que Cristo Jesús declaró nos haría libres, sentí que algo se me movía en el pie y se lo comuniqué a la practicista. Ella declaró: “La ley de Dios está operando para echar fuera de la consciencia la creencia de que la materia es verdadera y que la enfermedad puede vincularse a la imagen de Dios.” Yo había cesado de orar en el sentido de verme libre de algo, pues percibía claramente que en realidad había sido, era y sería siempre perfecto. Agradecí a Dios por la libertad que sabía era mía por ser hijo de Dios.

En ese momento el pie comenzó a supurar y muy pronto quedó reducido a su tamaño normal. El dolor se desvaneció y en poco tiempo pude levantarme y atender a mi trabajo como siempre. En ningún momento me sentí tentado de recurrir a otros medios, mas me apoyé en Dios, el gran Médico. Me dí cuenta claramente que la misma ley espiritual que operaba en los tiempos de Jesús todavía lo hacía y era suficiente para hacer frente a mi necesidad.

Mi gratitud no conoce límites por las numerosas bendiciones que la Christian Science me ha traído, entre las que se cuentan el ser miembro de La Iglesia Madre y una iglesia filial, por haber tomado instrucción en una clase autorizada de la Christian Science y por la experiencia relatada que me capacitó para probar tan rápidamente el poder sanador de esta Ciencia. Me es difícil hallar las palabras adecuadas con las cuales agradecer a Dios por nuestra amada Guía, Mary Baker Eddy, y por todos aquellos que tan desinteresadamente se dedican a bendicir a la humanidad.—

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