Durante el carnaval en Brasil, muchos niños salen de la ciudad con sus padres. En una ocasión. la familia de Paulo pasó el fin de semana en la casa de unos amigos frente al mar.
El domingo, el cielo estaba azul y el sol brillaba sobre el mar. Paula, su hermanita Carla, sus amigos y sus padres, se fueron de pic-nic a la playa. Pero no pudieron meterse al agua, porque el mar estaba muy agitado. Las olas eran tan fuertes que ni los pescadores se atrevían a salir en sus botes.
Paula y sus amigos jugaron en la arena y luego decidieron caminar por la playa. La mamá de Paula les dijo que no entraran en el agua; sólo podían mojarse los pies.
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