La posición de La Iglesia Madre en lo que respecta al lugar que ocupa Mary Baker Eddy en el cumplimiento de la profecía bíblica, está claramente definida en los párrafos que siguen. Estas conclusiones no son nuevas; las obras de nuestra Guía las confirman, y el estable desarrollo de los frutos de la Ciencia Cristiana Christian Science: Pronunciado Crischan Sáiens. atestigua la veracidad de estas conclusiones:
1. Mrs. Eddy, como Descubridora y Fundadora de la Ciencia Cristiana, comprendió que ella era la elegida por Dios para dar al mundo el Consolador prometido y, por consiguiente, que ella era la reveladora del Cristo, la Verdad, para esta época.
2. Mrs. Eddy consideró que algunas secciones del Apocalipsis (a saber, el capítulo 12), la señalaban a ella como la que cumplió la profecía al dar la total y final revelación de la Verdad, siendo así su obra complementaria a la de Cristo Jesús.
3. Así como Cristo Jesús ejemplificó la paternidad de Dios, Mrs. Eddy reveló la maternidad de Dios; ella representa en esta época la idea espiritual de Dios simbolizada por la mujer en el Apocalipsis. (Véase Ciencia y Salud, pág. 565: 13–23.)
4. Mrs. Eddy se consideró a sí misma el mensajero “designado por Dios” y “ungido por Dios” para esta época; la mujer elegida por Dios para descubrir la Ciencia de la curación cristiana e interpretarla para la humanidad. Mrs. Eddy está tan estrechamente relacionada con la Ciencia Cristiana, que es esencial tener un concepto exacto acerca de ella para comprender la Ciencia Cristiana; en otras palabras, la reveladora no puede ser separada de la revelación.
5. Este reconocimiento de su verdadera posición la capacitó para contrarrestar la oposición dirigida contra ella por el “dragón” (el magnetismo animal malicioso); con gran ternura agradeció a aquellos que vieron en ella a la mujer de la profecía y que por esa razón confiaron en ella, la obedecieron y la apoyaron en su misión.
6. Este mismo reconocimiento es igualmente vital para nuestro movimiento, porque la demostración es el resultado de la visión. La recopilación de esta evidencia indiscutible acerca del punto de vista que nuestra Guía tenía de sí misma y de su misión, marca un gran paso hacia el progreso. Utilizada con sabiduría, esta evidencia estimulará y afirmará el progreso de los Científicos Cristianos de hoy y del futuro. Establecerá unidad en el Movimiento en lo que respecta al tema vital de la relación de nuestra Guía con la profecía de las Escrituras.
Al registrar estos hechos importantes, les recordamos a los Científicos Cristianos las palabras de nuestra Guía (Miscellaneous Writings — Escritos Misceláneos, pág. 308): “Las Escrituras y la Ciencia Cristiana revelan ‘el camino’, y los reveladores personales ocuparán su justo lugar en la historia, pero no serán deificados”.
