La fundadora de la Ciencia Cristiana, Mary Baker Eddy, dijo una vez: "Me gusta que mis estudiantes se rían. Reírse con ganas a menudo rompe el mesmerismo". Emma C. Shipman, "Mrs. Eddy and the Class of 1898". We knew Mary Baker Eddy, pág. 142. Ella sabía que la risa y el buen humor podían ayudar a eliminar el letargo y la opresión de la mente carnal, y su sentido del humor fue evidente a lo largo de su vida.
Como el irlandés que dijo que había hallado el eco más interesante. Él dijo: ¿Cómo te va? y [el eco] respondió...
Es bien sabido que, después de recuperarse mediante la oración de un serio accidente en 1866, dedicó los tres años siguientes a estudiar la Biblia con toda devoción para comprender mejor lo que había ocurrido al sanarse. Aunque posteriormente escribió que se había mantenido "alejada de la vida social", Ciencia y Salud, pág. 109. durante ese tiempo disfrutó de ocasionales reuniones sociales muy divertidas. En noviembre de 1868 le escribió a su amiga Sarah Bagley: "Mis amigos me han estado sacando a pasear brevemente. Tú sabes que rara vez salgo a menos que alguien me lleve, y en estos últimos tiempos, han estado organizando fiestas para mí. Anoche asistí a una y la noche anterior a otra, las dos de gran estilo y con mucho humor". L08307, Mary Baker Eddy to Sarah Bagley, November 8, 1868, The Mary Baker Eddy Collection, The Mary Baker Eddy Library.