¿Has visto alguna vez lo que hace un prisma? Separa lo que se ve como luz blanca, en todos los colores del arco iris: desde el rojo y naranja hasta el azul y violeta. Para mí, todos estos colores son como las cualidades espirituales que a Dios le encanta expresar en ti. Dios es el bien infinito, y toda la bondad y el potencial que ya están presentes en Él brillan directamente a través de ti.
Puede que muchos piensen que te conocen, pero en realidad nadie te conoce como Dios, tu mejor amigo. Él te dio origen, así que sabe muy bien quién eres realmente. Dios ve en ti la pureza de Su propia bondad. Te hizo para que expreses todo lo que Él es. Así que eres la obra en la que se manifiesta la bondad de Dios.
Mary Baker Eddy, la persona que descubrió la Ciencia Cristiana, dijo que somos la "expresión infinita de la Mente infinita". Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras, pág. 336. La Mente, Dios, ¡constantemente te brinda cualidades espirituales, increíbles y variadas, para que las expreses!
Por ser expresión de Dios, eres capaz de hacer mucho más de lo que jamás podrías soñar hacer. Es importante que reclames esas cualidades que Dios nos da. Puede que el mundo a tu alrededor no las reconozca. Incluso, ¡algunos tal vez traten de convencerte de que esas cualidades no existen!
Hay una persona en la Biblia que tuvo que enfrentar ese tipo de dudas. Se llamaba Nehemías y vivió en Medio Oriente hace unos 2500 años. Nehemías empezó a hacer un trabajo muy grande: reconstruir el muro alrededor de Jerusalén, una ciudad importante. Muchas personas trabajaron con él, día tras día, apilando enormes bloques de piedra para construir las paredes.
Pero había personas que estaban en contra de lo que ocurría y se sentían resentidos contra Nehemías. Tenían tanta envidia y sentían tanto rencor, que comenzaron lo que hoy en día llamaríamos una campaña de publicidad negativa en su contra. Querían distraer a Nehemías, retrasar su trabajo e incluso detener el proyecto por completo. Comenzaron a hacer que la gente se riera de él y del trabajo que estaba haciendo. Sin embargo, esos comentarios malintencionados no afectaron a Nehemías, porque él sabía lo que Dios quería que hiciera. Él simplemente siguió orando y trabajando. Entonces los enemigos planearon un ataque contra Nehemías. "Pero", dice la Biblia, "Dios les impidió hacer lo que habían planeado". Nehemías 4:15, según la Contemporary English Version de la Biblia.
Estas personas después invitaron a Nehemías a reunirse con ellos para hablar de unidad y paz. Pero era todo un engaño. Estaban apelando a su bondad, pensando que no podría negarse a ser amable y dejar su trabajo para hablar de un tema tan noble como la paz. Pero Nehemías no cayó en la trampa, y siguió trabajando. Él sabía que Dios expresaba en él la capacidad para lograr su propósito con éxito y no iba a permitir que nada lo distrajera.
Esa gente intentó otros trucos para convencer a Nehemías de que dejara de trabajar en la reconstrucción del muro. Pero él continuó la obra. Nehemías era muy activo y decidió mantenerse firme y llevar a cabo lo que Dios le había pedido que hiciera. Lo impulsaba el deseo de servir a Dios, el bien, ¡y eso era lo único que le interesaba!
El trabajo fue terminado en 52 días. Todos en Jerusalén estaban contentos con Nehemías, pero él no le dio importancia a eso tampoco. A él sólo le importaba lo que Dios pensara.
Nehemías demostró que su mejor defensa era mantenerse del lado de Dios. Quizás a veces tú tengas problemas en la escuela con alguien que trata de molestarte a ti o a otro. Haz como hizo Nehemías, construye una fuerte defensa mental. Puedes recordar lo que Dios sabe de ti y del otro chico también. No permitas que nada te distraiga de tu trabajo. Orar de esta forma trae el poder de Dios a tu vida, y destruye todo pensamiento de que alguien pueda querer intimidarte.
La Ciencia Cristiana enseña que hay un solo poder, una fuerza, que es Dios. Entonces, no es que tengas que protegerte contra algún poder del mal que pueda existir aparte de Dios. Por el contrario, lo que importa es mantener en tu pensamiento la bondad que ya está completamente presente en ti. Al pensar en la experiencia de Nehemías imagino que, después de algún tiempo, hasta debe de haber disfrutado manteniéndose activo y defendiendo su pensamiento de todas esas mentiras y distracciones. Tú también deberías disfrutar de hacerlo. Una vez alguien dijo que cuando la Ciencia Cristiana no se disfruta, ¡hay algo que no estás haciendo bien!
La bondad de Dios siempre presente era la luz que guiaba los pensamientos de Nehemías, y es la misma que hoy está contigo y con todos. Recuerda, tú eres la obra, el lugar, en donde brilla la bondad divina. Puedes verla expresada en cualidades como inteligencia, creatividad y amor desinteresado. Tómate unos momentos durante el día para contemplar esa luz y pensar en quién eres ante los ojos de Dios, tu mejor amigo. La bondad de Dios está brillando a través de ti y de todo, así como los hermosos colores del arco iris resplandecen cuando la luz pasa a través del prisma.