Originales Web
Publicado originalmente en el Christian Science Journal de Enero de 1947.
“Cuando manejes el error, no le pongas una manija”. Este sabio consejo de un Científico Cristiano ha sido muy útil para el escritor.
Publicado originalmente en el Christian Science Sentinel del 5 de octubre de 1946.
¿Por qué será que algunas fases del pecado y la enfermedad con frecuencia parecen ser más tenaces y difíciles de vencer que otras? ¿Acaso el mal puede realmente inyectar más poder y tenacidad en un cáncer que en un cólico? Eso es lo que alega el mal, pero esa pretensión no tiene ninguna ley de la Verdad que la apoye. En un párrafo del libro de texto de la Ciencia Cristiana, Ciencia y Salud con la Llave de las Escrituras, bajo el título marginal “Las enfermedades no deben ser clasificadas”, Mary Baker Eddy dice: “Una enfermedad no es más real que otra” (pág.
Original en portugués
Nuestro mundo está influenciado por lo que pensamos. Cuando nuestro pensamiento está desbordando de amor a Dios, la armonía se manifiesta más naturalmente en nuestra experiencia.
Publicado originalmente en el Christian Science Journal de Febrero de 1943.
En el escenario de los acontecimientos humanos, ¡con qué frecuencia aparecen personajes que desempeñan los papeles de villanos y víctimas! El hombre fraudulento engañando a los crédulos, el ladrón quitando sus pertenencias a los incautos, el falso y ambicioso conspirando para desplazar a otro, el marido dominante y la esposa sufrida, el inmoral maquinando la caída del inocente, el malicioso intentando socavar y destruir a sus semejantes, el gobernante inescrupuloso oprimiendo pueblos conquistados. Es un cuadro muy triste: la mente mortal, alias los mortales, con móviles deshonestos y ciegos, abusando de otras mentes mortales.
Publicado originalmente en el Christian Science Journal de Abril de 1956.
En sus Escritos Misceláneos, bajo el título “Amor”, Mary Baker Eddy dice: “¡Qué palabra ésta! Con asombro reverente me inclino ante ella. ¡Sobre cuántos miles de mundos tiene alcance y es soberana! Aquello que no se deriva de cosa alguna, lo incomparable, el Todo infinito del bien, el Dios único, es Amor” (págs. 249, 250).
Publicado originalmente en el Christian Science Sentinel del 10 mayo de 1913.
La Ciencia Cristiana enseña que para comprender a Dios correctamente y para entender nuestra filiación divina, nuestra eterna unidad con Dios, el pensamiento debe estar libre de las confianzas falsas y de las conclusiones erróneas que resultan de ellas. Una de las conclusiones falsas más sutiles, es la creencia en un pasado material, la creencia de que hemos sido mortales y hemos tenido en el pasado experiencias materiales que fueron realidades.
Original en francés
Una tira cómica que vi en una revista me llevó a orar con el fin de comprender cómo servir mejor la Causa de la Ciencia Cristiana y mi Iglesia filial de Cristo, Científico. La misma mostraba a un Dios todopoderoso, creador del universo, hablando con un hombre pequeño, y mostrándole Sus músculos y Su fuerza.
Publicado originalmente en el Christian Science Journal de Mayo de 1966.
La práctica de la Ciencia Cristiana comienza con los hechos de la existencia verdadera: la verdad acerca de Dios, que es Su totalidad; la verdad acerca del hombre, que es su perfección como idea de Dios; y la verdad acerca del mal, que es su nada o inexistencia. El pensamiento que se basa en estos hechos no es influido fácilmente por las sugestiones de que hay algo presente aparte de la totalidad de Dios, la perfección del hombre y la nada del mal.
Publicado originalmente en el Christian Science Journal de Octubre de 1966.
Un rayo de luz, no una alfombra en la puerta, es un buen símbolo de humildad. Un rayo de luz solo puede existir junto con su fuente, nunca actúa solo.
Original en español
Dado el impacto tan grande que los avances tecnológicos tienen en nuestra vida diaria, es sabio considerar seriamente cómo nos están influyendo los medios sociales y la prensa en general. Esta llamada mental de alerta me llegó con persistencia cuando residía en una gran ciudad metropolitana.