Editoriales
Al hablar con cristianos de otras religiones, los Científicos Cristianos podrían descubrir que persiste cierta confusión entre sus amigos respecto a lo que se enseña en la Ciencia Cristiana sobre la naturaleza de la oración. No obstante, para el Científico Cristiano, su concepto de comunión con Dios corresponde directamente con lo que enseña la Biblia.
El momento tuvo que haber sido tenso, hasta dramático. Cristo Jesús no respondió a su pesquisidor.
¿Qué podría decirse de la frialdad, la falta de solicitud y de afecto espiritual en la iglesia? ¿Nos regocijamos espontáneamente por la bondad y el amor que encontramos en nuestra iglesia? ¿O tenemos motivo para entristecernos? Nuestra Guía, Mary Baker Eddy, habló con franqueza sobre este tema después de un sermón en el culto de comunión en La Iglesia Madre en 1896. Con compasivo realismo escribió así a algunos amigos: “Observo que la atmósfera general de mi iglesia es tan fría y solemne como los pisos de mármol”.
Aun cuando la inflación se parece a la maleza, que se extiende a través del campo económico del mundo industrial, podemos desarraigar esta repugnante mala hierba. No crecerá desenfrenadamente si manejamos nuestros asuntos personales, nacionales e internacionales más inteligentemente.
Y he aquí que los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. Y hubo una voz de los cielos que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia (Mateo 3:16, 17).
La curación en la Ciencia Cristiana Christian Science (crischan sáiens) no cambia meramente dificultades presentes en historia pasada. La curación en la Ciencia Cristiana demuestra que las dificultades son errores acerca de la verdadera historia del hombre real, creado a semejanza de Dios.
Ésta es una era maravillosa para comprender que el hombre es espiritual y no material. Es un momento único y crítico en la historia para darse cuenta de que la unidad que puede existir entre todos nosotros ha de proceder directamente de nuestra comprensión de la unidad que el hombre eternamente tiene con el Espíritu, Dios.
Curación: ¡motivo de regocijo! Desde los primitivos tiempos bíblicos muchos han reconocido la manifestación de la curación obtenida mediante la oración, como cierto símbolo de la presencia y el amor de Dios. El supremos poder de Dios, actuando en la experiencia humana con la fuerza de la ley divina, ha movido montañas cuando la enfermedad y el dolor surgieron amenazadores.
El método de curación de la Ciencia Cristiana Christian Science (crischan sáiens) trae al sentido humano un reconocimiento cada vez mayor del infinito poder del Amor divino y de su disponibilidad para sanar y salvar. Para el pensamiento material, la existencia de un poder espiritual restaurador, invisible a los sentidos pero al alcance de la humanidad, parece sumamente incomprensible.
¿Has hablado alguna vez por teléfono con un practicista de la Ciencia Cristiana? ¿No? Quizás tu mamá o tu papá hayan llamado a alguno cuando tú no te sentías bien. ¿Pero sabes una cosa? No tienes que esperar a ser grande para hablar con un practicista.