Iglesias de la Ciencia Cristiana, sus Salas de Lectura y Escuelas Dominicales
[Christian Science Churches, Their Reading Rooms, and Sunday Schools]
La Iglesia Madre, La Primera Iglesia Científica de Cristo, en Boston, Massachusetts, E.U.A., y sus filiales en muchos países, constituyen la Iglesia de la Ciencia Cristiana, o sea la Iglesia Cientifíca de Cristo. Mary Baker Eddy la fundó como “iglesia destinada a conmemorar la palabra y las obras de nuestro Maestro, la cual habría de restablecer el Cristianismo primitivo y su olvidado elemento de curación” (manual de la iglesia, pág. 17).
Las Lecciones que se leen en los servicios dominicales de La Iglesia Madre y sus filiales se componen de pasajes de la biblia y del libro de texto de la Ciencia Cristiana, ciencia y salud con clave de las escrituras por Mary Baker Eddy.
Cada iglesia filial mantiene una Escuela Dominical donde se aceptan alumnos hasta la edad de veinte años.
En las reuniones vespertinas de los miércoles también se leen pasajes de la biblia y de ciencia y salud, y se ofrecen testimonios de curaciones, relatos de experiencias y comentarios sobre la Ciencia Cristiana.
Cada iglesia mantiene una sala de lectura abierta al público gratuitamente, en la cual pueden leerse, pedirse prestadas o comprarse las publicaciones autorizadas de la Ciencia Cristiana.
Se invita cordialmente al público a los servicios de las iglesias y a las salas de lectura.
Del Tesorero de La Iglesia Madre
[From the Treasurer of The Mother Church]
Los pagos de la capitación y demás contribuciones, como también cambios de dirección, deben ser enviados a Roy Garrett Watson, Treasurer, 107 Falmouth Street, Boston, Massachusetts, U.S.A. 02115.
Giros postales internacionales y Giros en dólares
[International Money Orders and Dollar Drafts]
Los giros postales internacionales y los giros en dólares que llegan a la Sociedad Editora en Boston incluyen solamente el nombre y dirección del remitente y la suma enviada. Para poder servirles mejor, les rogamos que nos escriban al enviarnos el giro postal o el giro en dólares, diciéndonos a qué debemos destinar el envío. Esto nos ayudará a evitar las demoras que causaría el tener que escribirles. Los giros en dólares comprados en el banco del país pueden ser tramitados con más prontitud que los giros postales.