Con el corazón lleno de gratitud deseo dar testimonio de las innumerables bendiciones y curaciones que he recibido mediante la Ciencia CristianaChristian Science: Pronunciado Crischan Sáiens.. Esta Ciencia llegó a mi conocimiento en un momento en que la desesperación y la ansiedad reinaban en nuestro hogar.
Mi esposo se hallaba bajo tratamiento médico desde hacía años debido a una afección al corazón, presión arterial etc., y a mí los médicos me habían pronosticado una vida de invalidez. Según ellos, tenía una enfermedad incurable a la columna vertebral y lo único que me quedaba era vivir a fuerza de calmantes. Muchas veces sentí como si estuviera perdiendo el uso de la razón y hasta tuve la idea del suicidio.
Unos buenos amigos que estaban enterados de nuestros pesares nos presentaron a una practicista de la Ciencia Cristiana, quien muy afectuosamente nos explicó que la experiencia por la cual parecía que estábamos atravesando era una ilusión y no un hecho de la Vida. Nos explicó que debíamos nacer de nuevo espiritualmente, pero que este renacimiento sólo podía producirse en nuestra propia consciencia, y que debíamos reemplazar todos nuestros pensamientos temerosos y erróneos con la verdad acerca de ellos. Instantáneamente nos sentimos iluminados y la Ciencia Cristiana se convirtió en una maravillosa bendición en nuestra vida.
Aparte de nuestro completo restablecimiento, muchos otros problemas fueron solucionados mediante la inspiración del Amor divino. Estamos convencidos que nuestra religión es el Consolador prometido de que hablaba Cristo Jesús y de que nuestra amada Guía, Mary Baker Eddy, fue la designada para que nos lo revelara. Le estamos agradecidos por sus infatigables esfuerzos a fin de que su descubrimiento quedara fácilmente asequible para todos.
Gracias a Dios, gracias a nuestra amada Guía, y a nuestra querida practicista que nos ayuda con amor incansable. A nuestro Padre, gracias, muchas gracias. — Montevideo, Uruguay.
