En el prefacio de Ciencia y Salud por Mrs. Eddy leemos lo siguiente (pág. vii): “El pastor vigilante ve los primeros tenues rayos del alba, antes de que llegue el pleno resplandor de un nuevo día.”
En el año 1923 mientras asistía a una conferencia sobre la Ciencia Cristiana tuve mi primera vislumbre de esta Ciencia. La buena semilla de la Verdad fue sembrada y diez años más tarde me torné a esa religión.
En esa época me hallaba sufriendo intensamente debido a úlceras al estomágo. Había seguido una dieta muy estricta, habiéndome sometido a tratamiento médico por varios especialistas, pero no me sentía nada mejor. Me dispuse entonces a comenzar un estudio sincero de la Ciencia Cristiana y la curación se efectuó rápidamente. Poco después decidí hacerme miembro de La Iglesia Madre, La Primera Iglesia Científica de Cristo, en Boston, Massachusetts, y también de una iglesia filial.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!
