Amigos del Heraldo:
Quiero saludarles y decirles que Dios siempre los tenga con salud para que así puedan seguir trabajando en su programa de radio.
Primero quiero presentarme. Soy ecuatoriano y hace muchos años que vivo en Canadá. Soy casado y tengo dos hijos también casados.
Mi religión és la católica, que profeso desde que tuve uso de razón. Porque eso fue lo que mis abuelos y padres me inculcaron desde hace más de medio siglo.
Tengo una radio de onda corta y todas las noches escucho la emisora ecuatoriana HC.
Un día, dicha emisora no entraba y había mucha interferencia, así es que opté por escuchar otra emisora en español. Y fue cuando empecé a escuchar todas las noches la emisora de ustedes.
Me gustó mucho lo que dicen sobre cómo Dios actúa entre los seres humanos. Me encanta escuchar a las personas que han experimentado sanación leyendo el libro Ciencia y Salud y el Heraldo.
Les escribo porque quiero estudiar ese libro, Ciencia y Salud, que de paso les cuento que acá en Toronto, Canadá, lo he buscado en librerias hispanas, pero no lo he encontrado.
Quisiera saber dónde puedo consequir el libro en este país.
Espero que esta carta que les escribo tenga algún efecto en mi vida, porque estoy muy sediento de conocer más de Dios.
Bueno, en una próxima carta les contaré qué pasa con mi vida. Hoy sólo me resta saludarles y desearles que Dios siempre les proteja porque la obra que ustedes realizan es maravillosa.
Esperando su pronta contestación me despido de uds.
Que Dios los bendiga.
Canadá
Queridos amigos de la Christian Science:
Es un honor y un gran privilegio dirigirme a ustedes por segunda vez.
Estoy muy complacido por la entrega excelente de su prestigiosa revista, me ha servido de mucha ayuda en momentos de indecisiones. Veo que está capacitada para aclarar el pensamiento por encima del error.
Esta ideas, que escucho semanalmente a través de la radio, me han llevado a comprender más mi naturaleza divina, la cual pone de manifiesto la Sra. Eddy en su galardonada obra Ciencia y Salud.
He comentado a mis compañeros sobre la Christian Science, y ellos afirman que con un conocimiento como éste alcanzaríamos la victoria final y eterna.
Sería para mí una profunda alegría poder obtener esta obra de Mary Baker Eddy.
Mi pensamiento consiste en afirmar que si una gran parte de la humanidad estuviera consciente de las ideas que ustedes con gran dirección exponen en sus transmisiones, no cabría el egoísmo, la enfermedad y la muerte en el mundo.
Quisiera que me sean contestadas las siguientes preguntas:
¿Aceptan la teoría de la reencarnación? ¿Creen posible la evolución del hombre de mono a hombre? ¿Cómo consideran al universo? ¿Fue Jesucristo Dios en la tierra?
Es con mucho agrado que les escríbo conociendo que ustedes la están leyendo con aprecio.
Muchas felicitaciones por su gran trabajo, como heraldos de la Verdad. Nuevamente les pido de profundo corazón que me envíen el libro.
Con amor infinito, se despide.
República Dominicana