Todos necesitamos sentirnos útiles, y es importante levantarnos por la mañana con un propósito porque nos ayuda a sentirnos felices y productivos.
Dios tiene dentro de Su plan un propósito para cada persona.
No obstante, para mucha gente parece que es algo muy serio sentir que no hay propósito alguno en su vida. La falta de dirección es la causa del aburrimiento que afecta a los jóvenes que viven en inferioridad de condiciones en las grandes ciudades, así como del desaliento de los que tienen necesidades especiales. La falta de alguna actividad significativa puede ser un verdadero problema en cualquier instancia de la vida.
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