Mi familia ha sido bendecida por la comprensión de la omnipresencia y la bondad infinita de Dios y al poner nuestra confianza en Él. Me gustaría compartir tres ejemplos.
Mi esposa sirvió como organista para nuestra filial local de la Iglesia de Cristo, Científico, durante unos seis meses, mientras se buscaba un organista permanente. Ella había solicitado el puesto pero, después de una serie de audiciones de otros organistas, no fue seleccionada y se sintió muy decepcionada.
Al orar sobre esto, pensé que, puesto que los servicios de nuestra iglesia estaban dedicados a adorar a Dios, era la mano divina la que guiaba el bienestar de nuestra iglesia, incluida la selección de los músicos. Eso me aseguró que si era correcto que mi esposa continuara sirviendo como organista, ningún poder en la tierra podía frustrarlo. Por otro lado, si la tarea no era para ella, ningún poder en la tierra podría colocarla en ese puesto. Dios, el Amor divino, tenía el control total. Eso nos dio paz. Varias semanas después, la persona originalmente seleccionada decidió no aceptar el puesto, y se le pidió a mi esposa que sirviera como nuestra organista permanente.