
Relatos de curación
Nellie tenía dolor en las articulaciones de sus piernas. Oró para saber que en la creación de la Mente divina no hay historia de imperfección, puesto que la Mente no creó nada que no sea bueno y perfecto. Siente mucha gratitud por esa curación en la Ciencia Cristiana.
Cuando se lastimó la pierna mientras vivía en el extranjero, esta autora oró como aprendió en la Ciencia Cristiana. Al vivir el amor, ser el amor y conocer sólo el amor de Dios, no sólo sanó de la lesión en la pierna, sino también del astigmatismo que padecía desde hacía tiempo.
Susan nos cuenta cuán profundamente agradecida está de confirmar la poderosa promesa y protección de la idea de que nadie puede estar jamás fuera del cuidado de Dios. Lee cómo su hijo fue protegido durante el accidente que tuvo cuando fallaron los frenos de su bicicleta.
Al no poder cantar y hablar libremente durante más de un año, esta autora oró para mantener su pensamiento puro y sin adulterar en Dios, y apreciar su gratitud por la Iglesia. Entonces se produjo una hermosa y completa curación.
Reconocer al orar que nada de lo que Dios hizo podía ser doloroso o debilitante, ayudó a esta autora a superar los recurrentes dolores menstruales de manera permanente.
Comprender a través de la oración que nada inarmónico puede entrar en nuestro verdadero ser espiritual calmó los temores de Mark, y su visión fue completamente restaurada después de haberse lesionado un ojo.
Al reconocer gradualmente que el compañerismo nunca puede perderse porque el amor de Dios por nosotros es constante y no cambia, este autor superó el sentimiento de dolor después del fallecimiento de su esposa.
Jim se sanó completa y rápidamente de una gripe después de leer un capítulo de Ciencia y Salud con la Llave de las Escrituras por Mary Baker Eddy. Esta experiencia fue crucial para consolidar su confianza en el hecho de que la curación es una consecuencia inevitable de leer este libro.
Constance reconoció mediante la oración quién y qué es como semejanza de Dios, que somos todos amados, valorados y necesarios. Como resultado, ella fue sanada de una depresión crónica.
Las oraciones de un hombre por su esposa la sanan de úlceras sin necesidad de cirugía.