Yo oí por primera vez de la Christian Science en el año de 1929 por unos amigos cuando estaba curándome en un sanatorio. Esos amigos me interesaron en la Christian Science y me llevaron todas las publicaciones autorizadas que habían sido traducidas al francés. Pocas semanas después salí del sanatorio y pronto reanudé mi trabajo.
Por lo que enseña “Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras” por Mary Baker Eddy, aprendí a conocer a Dios y la relación que existe entre el hombre y El. Comprendí bien el significado de los Artículos de Fe de la Christian Science y me alegré de que el Amor no era ya inaccesible para mí como antes me parecía, sino al contrario, siempre presente.
Las circunstancias me desviaron temporalmente de la Christian Science, pero sus enseñanzas las retuve vívidas en mi mente. No olvidé que Dios es “remunerador de los que le buscan” (Hebreos 11:6), y que la Verdad nos libra de todo mal. Así recobré mi libertad, ileso, prontamente después de haberme arrestado los alemanes en 1943. Para los sentidos humanos, ese arresto pudo haber sido de consecuencias fatales.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!