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Estoy profundamente agradecida...

Del número de julio de 1963 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Estoy profundamente agradecida a mi madre por haber dado a sus hijos el ejemplo de cómo vivir las verdades de la Ciencia Cristiana [Christian Science] y habernos enseñado a estudiarlas y cómo aplicarlas. A diario nos decía: “Busquen la guía divina” y “Hagan el trabajo mental con devoción.” Cuando he aplicado la Ciencia Cristiana [Christian Science] correctamente, todas mis necesidades han sido solucionadas.

Buscando la guía divina he podido hallar empleo, he sido guiada a encontrar lugares adecuados donde vivir y me he hecho de muchos amigos. Haciendo el trabajo mental apropiado, he establecido en la consciencia el derecho de nacimiento del hombre a la armonía, de lo cual han resultado muchas curaciones.

Hace más o menos cuatro años caí enferma con todos los síntomas de envenenamiento. A pesar del fuerte dolor, me aferré al concepto de que mi ser verdadero era perfecto y armonioso. El alivio se manifestó muy lentamente, pero al segundo día pude hacer un viaje de tres días con un miembro de mi familia. Durante nuestro viaje de vuelta, me puse a meditar sobre esta frase que aparece en Ciencia y Salud por Mrs. Eddy en la página 495: “Cuando la ilusión de la enfermedad o del pecado os tiente, aferraos firmemente a Dios y Su idea.” Al esforzarme por percibir que en realidad expresaba solamente las cualidades de Dios, la creencia de la realidad en un ser aparte de El se desvaneció de mi consciencia. Poco después me sentí completamente libre.

Cuando arribamos a casa me sentí tan libre y gozosa que subí corriendo las escaleras a mi departamento. No sufrí ningún mal efecto después de esta experiencia y he estado libre de todo disturbio digestivo.

Estoy muy agradecida por la revelación del Cristo, la Verdad, a esta era y por la comprensión siempre en aumento que tengo de Dios. También agradezco por la inspiración siempre mayor que me aporta el ser miembro de La Iglesia Madre y de una iglesia filial y por haber tomado instrucción en una clase autorizada. Mi más sincero deseo es servir al movimiento de la Ciencia Cristiana como verdadera Científica Cristiana. —

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