Me gusta mucho la manera de orar en la Ciencia Cristiana porque no empezamos con el problema, sino con Dios. Cuando logramos cambiar nuestro pensamiento y percibimos la perfección de Su creación, la condición, cualquiera sea, desaparece.
Un día estaba con el período y tenía muchos dolores. Todo el día traté de ignorarlos, pero llegó un punto en que la molestia era tan grande que no pude continuar trabajan-do. Entonces, comencé a orar.
A mí no me gusta repetir la oración como si fuera una fórmula, sino tratar de entender cada cosa que digo. Así que oré varias veces con la "declaración científica del ser" de Ciencia y Salud, reflexionando profundamente en su significado. Como en ese momento el problema más tangible era el dolor, cambiaba la palabra materia por dolor. Decía: "No hay vida, verdad, inteligencia, ni sustancia en el dolor, todo es Mente infinita". Comprendi que Mente se refiere a Dios. "Y su manifestación infinita", refiriéndose a todo lo que Dios ha creado. "Porque Dios es Todo-en-todo". Y cuando llegué a la mitad de la declaración, dije: "el Espíritu es Verdad inmortal, y el dolor es error mortal" (Pág. 468).
Me sentí muchísimo más tranquila al reconocer mi origen espiritual y de pronto me di cuenta de que había estado preocupada por varias cosas y me había sentido como condenada al dolor, no físico sino de preocupación y de temor. Y cuando declaré que no había dolor en la materia comprendí que lo que sentía no tenía realidad alguna porque Dios jamás me había condenado a sufrir, y que si Él no me había condenado, nada ni nadie más podía hacerlo. Esta percepción me brindó una sensación de libertad que no sólo contribuyó a la curación, sino que dejé de preocuparme por los demás problemas. No es que se resolvieron inmediatamente, sino que me sentí capaz de superarlos. Entonces noté que el dolor había desaparecido y pude continuar trabajando sin ninguna molestia. De hecho, nunca más volví a tener dolores.
La diferencia estuvo en que ya no enfrenté las dificultades como una víctima resignada a sufrir, sino como alguien que está por encima de eso y sabe que va a salir adelante porque el Amor divino está con él.
Siento mucha gratitud a Dios por las bendiciones que he recibido con la Ciencia Cristiana.
Arequipa, Perú