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Libros y una mesa de picnic

Del número de marzo de 2009 de El Heraldo de la Ciencia Cristiana


Paul White es educador en la West Valley Leadership Academy en el Canoga Park, cerca de la ciudad de Ventura, California. En los últimos 3 ó 4 años su iglesia ha sido un grupo de la Ciencia Cristiana MUY informal. Todos los domingos a las 8 de la mañana, Paul va a un parque grande que hay cerca de su casa, con una mesa de picnic, la Biblia, Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras, un Cuaderno Trimestral de la Ciencia Cristiana en español e inglés, y un diccionario en estos dos idiomas.

Algunos habitantes de ese vecindario son miembros de pandillas y adictos o traficantes de drogas, otros reos en libertad condicional, gente sin hogar, grupos de jugadores de fútbol, y unas pocas personas mayores que han vivido allí desde antes que el vecindario se deteriorara y no tienen medios para mudarse.

Menos del 10% de las personas de allí hablan inglés, y aunque su español es limitado, Paul nunca ha tenido problemas. Él se sienta cerca de un sendero en el parque y al principio les preguntaba en español a los que pasaban si deseaban hablar acerca de Dios, pero ya no necesita hacerlo. Simplemente se sienta y comienza a orar por el barrio y de una a seis personas se acercan y se sientan esperando escuchar el mensaje que les va a dar. El 100% de ellos nunca ha oído hablar de la Ciencia Cristiana. Paul siempre les pregunta si hay algo en sus vidas que necesitan resolver, y les enseña a orar por ellos mismos y a esperar resultados. Algunas personas sólo vienen una vez, otras han venido a verlo todas las semanas por más de dos años. Hay quienes vienen a escuchar el Padre Nuestro o un versículo de la Biblia, y luego se van a jugar básquetbol. Mientras que otros se quedan de una a dos horas. Algunos no saben leer ni escribir, otros se han graduado del bachillerato e incluso de la universidad. Hay quienes cuando llegan son adictos a las drogas o al alcohol. Otros son muy religiosos y conocen bien la Biblia. Viene gente de todas las edades. A veces sólo lee pasajes de la Biblia, otras casi toda la Lección-Sermón de la Ciencia Cristiana, y cuando hay niños celebra una especie de Escuela Dominical.

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