Recientemente se ha estado hablando mucho en las noticias acerca de las violaciones contra las mujeres, y me gustaría compartir una experiencia que tuve donde fui protegida del abuso.
Después de la universidad fui a vivir a un apartamento. No hacía mucho tiempo que vivía allí, cuando desperté en medio de la noche sintiendo que me sujetaban por los hombros. Mi cabeza estaba vuelta hacia la pared, así que no podía ver nada. Solo logré mover los dedos, apenas lo suficiente como para saber que estaba tocando vaqueros.
Estaba muy asustada, pero casi instantáneamente me vino al pensamiento la palabra amor. Dios es Amor, y me sentí inmediatamente envuelta en este Amor divino. Y así sin más, el miedo desapareció por completo.
En Ciencia y Salud con la Llave de las Escrituras, Mary Baker Eddy escribe: “Revestido con la panoplia del Amor, el odio humano no puede alcanzarte” (pág. 571). Recientemente, busqué el significado de esas palabras y encontré que revestido significa vestido, arropado, cubierto, y panoplia significa armadura o cubierta protectora. Esa noche sentí como si hubiera sido instantáneamente envuelta en una manta acorazada. Sabía que solamente el bien podía estar presente.
Entonces la presión sobre mis hombros cesó, y en un momento escuché que se cerraba la puerta del apartamento. Esperé un poco antes de levantarme, luego revisé el apartamento. No habían extraído, roto ni siquiera movido nada. Durante todo el tiempo que viví en ese complejo, no hubo otros intentos de entrar en mi casa, ni tampoco me enteré de que hubieran entrado en ningún otro apartamento.
Uno podría decir que esto fue una curación muy simple. Pero se trató de una prueba maravillosa de la protección que Dios brinda a Su hija. Cuando pienso en el incidente, me pregunto si el intruso también se sintió envuelto en el Amor, al punto de que el sentimiento mortal de odio ya no lo tocaba, tal y como yo me sentí envuelta en el Amor y el miedo no pudo tocarme.
A medida que pasan los años me siento más agradecida por esta curación. Dios me protegió. ¿Qué más podría pedir?
Gemariah Love
El Paso, Texas, EE.UU.