Recientemente se ha estado hablando mucho en las noticias acerca de las violaciones contra las mujeres, y me gustaría compartir una experiencia que tuve donde fui protegida del abuso.
Después de la universidad fui a vivir a un apartamento. No hacía mucho tiempo que vivía allí, cuando desperté en medio de la noche sintiendo que me sujetaban por los hombros. Mi cabeza estaba vuelta hacia la pared, así que no podía ver nada. Solo logré mover los dedos, apenas lo suficiente como para saber que estaba tocando vaqueros.
Estaba muy asustada, pero casi instantáneamente me vino al pensamiento la palabra amor. Dios es Amor, y me sentí inmediatamente envuelta en este Amor divino. Y así sin más, el miedo desapareció por completo.
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