Cuando la abuela de repente había quedado totalmente paralizada y sin poder hablar, Nancy oró, restaurando su sentido espiritual. Eso produjo una curación instantánea mediante el Cristo en Navidad.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!