Cuando el dentista le dijo que ella no tenía más remedio que hacerse extraer las muelas del juicio, esta estudiante de bachillerato eligió un camino diferente. ¿Qué decidió? Llamó a una practicista de la Ciencia Cristiana y oraron juntas; los resultados sorprendieron al dentista.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!