
Relatos de curación
Deseo Compartir Con ustedes una de las muchas curaciones que obtuve mediante la Ciencia Cristiana. Quiero compartir con la humanidad la esperanza y fortaleza que uno recibe en cada situación cuando confía en el cuidado de Dios.
Desde Que Era adolescente sufrí de hemorragias nasales periódicas que aunque eran desagradables no eran serias. Sin embargo, a medida que pasaba el tiempo y me gradué de la universidad, las hemorragias se volvieron alarmantes.
Estoy Verdaderamente agradecida por la Ciencia Cristiana, la que conocí hace tres años. Hace poco, tuve la oportunidad de tomar instrucción en clase de Ciencia Cristiana, y esto en verdad ha profundizado mi comprensión espiritual.
Mi Nombre Es Garret, y estoy en quinto grado. Un día de verano regresé a casa después de pasar un día en el campamento, y no me sentía muy bien.
Pertenezco A Una tercera generación de Científicos Cristianos y toda mi vida he dependido de esta maravillosa Ciencia. Me siento feliz de ser miembro de La Iglesia Madre y de haber sido miembro de varias iglesias filiales en diferentes ocasiones durante veintitrés años.
Me Crie En la Ciencia Cristiana y he tenido muchas curaciones físicas. Estoy especialmente agradecida por la entereza moral que obtuve debido a que mis amorosos padres y mis maestros en la Escuela Dominical fomentaron mi espiritualidad.
En El Manual de La Iglesia Madre , Mary Baker Eddy cita estas palabras de Pablo en 1 Corintios: "Glorificad.
Hay Una Promesa en Salmos que dice: "Tu juventud se renovará como la del águila" (según la version King James de la Biblia). Recientemente reconocí que he estado experimentando el cumplimiento de esta amorosa promesa durante los últimos seis años.
He Servido Activamente en nuestra Sociedad de la Ciencia Cristiana de la localidad por más de dieciséis años. Agradezco al Padre por Su cuidado durante estos años en los cuales he superado dificultades físicas y morales.
Por Muchos Años he sido estudiante de la Ciencia Cristiana. Tuve mi primera curación cuando tenía diez años.