Skip to main content Skip to search Skip to header Skip to footer

Relatos de curación

Por muchos años he confiado únicamente en la ayuda de Dios y en el poder sanador del Cristo, la Verdad, para solucionar todas las dificultades que se me han presentado, como lo aprendemos a hacer en la Ciencia Cristiana. Cuando estuve en el Lejano Oriente durante la Segunda Guerra Mundial, sané de una intoxicación causada por la ingestión de alimentos en mal estado.

Con mucha alegría y profunda gratitud expreso mi agradecimiento a la Ciencia Cristiana por muchas bendiciones y curaciones, y por la protección que he experimentado. Recientemente sané de intensos dolores en el corazón.

Para mí, conocer la Ciencia Cristiana fue como nacer de nuevo.

Para mí, conocer la Ciencia Cristiana fue como nacer de nuevo. Me encontraba sufriendo de la espina dorsal, me resfriaba frecuentemente, padecía de bronquitis asmática y me aquejaban constantes dolores de cabeza.

Hace más de diez años supe acerca de la Ciencia Cristiana a través de un amigo que me dio un ejemplar de la edición en alemán del Heraldo para que lo leyera. Se abrió un cielo nuevo para mí.

Cuando conocí la Ciencia Cristiana en una conferencia hace seis años,...

Cuando conocí la Ciencia Cristiana en una conferencia hace seis años, pasaba por momentos muy difíciles. Había estado recibiendo tratamiento médico por síntomas de reumatismo y estaba en observación constante por parte de un ginecólogo por haber tenido una seria intervención quirúrgica.

Lo más grande que he encontrado en la Ciencia Cristiana Christian Science (crischan sáiens) es haber comenzado a comprender que Dios es nuestro creador. Por medio de la revelación de Dios a Mary Baker Eddy y el profundo amor que ella demostró al compartir esta revelación con el mundo en su libro Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras, encontramos la manera de reclamar el cuidado amoroso de nuestro Padre-Madre Dios.

En cierta época mi esposo y yo nos encontramos sin familia, amigos,...

En cierta época mi esposo y yo nos encontramos sin familia, amigos, casa, empleo ni posición. Nos mantenía un fuerte amor a Dios y una creciente confianza en la Ciencia Cristiana, la que recientemente habíamos conocido.

Desearía expresar mi profunda gratitud a Dios por la Ciencia Cristiana. Dice la Biblia (Salmo 61:4): “Yo habitaré en tu tabernáculo para siempre; estaré seguro bajo la cubierta de tus alas”.

Después de muchas operaciones y mucho tratamiento médico, pasaba...

Después de muchas operaciones y mucho tratamiento médico, pasaba gran parte de mi vida en cama. Como había sido muy activa y tenía una pequeña hija para cuidar, esto era muy deprimente.

“Las artes profiláctica y terapéutica (esto es, preventiva y curativa) pertenecen enfáticamente a la Ciencia Cristiana, como se vería fácilmente si la psicología, o la Ciencia del Espíritu, Dios, fuera entendida” ( Ciencia y Salud por la Sra. Eddy, pág.

La misión del Heraldo

 “... para proclamar la actividad y disponibilidad universales de la Verdad...”

                                                                                                          Mary Baker Eddy

Saber más acerca del Heraldo y su misión.