Relatos de curación
Siendo estudiante de la Christian Science y miembro de La Iglesia Madre y de una de sus ramas, he leído con mucho interés los múltiples testimonios provechosos que se van publicando en nuestros periódicos. A todos estos yo quisiera agregar el mío.
Siento mucha gratitud por el privilegio de ser testigo de la Verdad, y espero que otras personas puedan recibir algún beneficio de las experiencias que yo he tenido. Hace más de seis años que mis entradas se agotaron.
La Christian Science me fué presentada en el año de 1937 en un momento de mi vida en que estaba pasando por tiempos sumamente difíciles y cuando todo recurso material me había fallado. Fué entonces que un antiguo amigo me indicó que yo debiera aprender a amar más.
Mi apreciación cada vez mayor de nuestra Guía, Mary Baker Eddy, y de todas las actividades de la Christian Science, me alienta a expresar mi gratitud por las muchas bendiciones que he recibido desde que me puse a estudiar esta Ciencia. Por su medio he sido purificada y regenerada, gozando de una mayor comprensión de Dios, del hombre y del universo, así como de salud, placeres legítimos, alegría y muchas buenas amistades.
Durante los treinta años que hemos estado estudiando la Christian Science El nombre dado por Mary Baker Eddy a su descubrimiento (pronunciado Críschan Sáiens) y que, traducido literalmente, es la "Ciencia Cristiana. " , nuestra familia ha recibido innumerables bendiciones.
"Díganlo así los redimidos de Jehová. " Durante los diez años que he sido estudiante de la Christian Science, he tenido numerosas pruebas de su poder curativo y regenerador.
Deseo agregar al testimonio de mi esposa, unas cuantas palabras de agradecimiento por las innumerables bendiciones que la Christian Science me ha proporcionado. Una de mis primeras curaciones, de hace unos treinta años, fué la de una seria dificultad que tenía para hablar.
"Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de las misericordias y Dios de toda consolación; el cual nos consuela en toda nuestra aflicción, para que podamos nosotros consolar a los que están en cualquiera angustia, por medio de la consolación con que nosotros mismos somos consolados de Dios. " Hace varios años, al perder a un ser muy querido, quedé inconsolada durante cinco años, hasta que aprendí la bendita verdad de la existencia, según se enseña en la Christian Science.
Jamás dejaré de sentirme agradecido a Dios por haberme llevado a la Christian Science. Cierto miércoles por la noche, habiéndoseme pasado la hora para asistir a una reunión de la iglesia a que pertenecía, decidí ir a la iglesia de la Christian Science.
Con un sentido muy profundo de gratitud hacia Dios, por todo lo que la Christian Science ha hecho por mí, quisiera valerme de esta oportunidad para dar testimonio de cierta curación que obtuve en el año de 1923. Antes de experimentar esta curación, había leído la biografía de Sibyl Wilbur, titulada The Life of Mary Baker Eddy (La Vida de Mary Baker Eddy).