
Relatos de curación
Los accidentes no pueden ocurrir en el orden infinito del gobierno espiritual de Dios. Las cualidades espirituales que constituyen nuestro ser verdadero como idea espiritual de Dios son permanentes y están intactas, así que no pueden dañarse o lastimarse, y cualquier condición corporal cede a estas verdades espirituales.
Dar gracias a Dios es muy poderoso. La gratitud afirma y reconoce lo que está sucediendo en este momento. Sabe lo que Dios sabe, y pone en consonancia el pensamiento con la presencia y el poder de Dios, donde no hay lugar para la discordia, de ningún tipo.
Katherine está muy agradecida por esta curación y por cómo aprendió a orar y sanar a través de su estudio de la Ciencia Cristiana. Lea cómo ella se ha curado.
Cada vez que le venía al pensamiento el diagnóstico médico, Robert oraba para saber que en la creación de Dios no hay deficiencia ni exceso.
Wayne comprendió que su ser perfecto no incluía dolor y no requería ningún remedio material. Además, se dio cuenta de que esta curación podría ser inmediata, así como ocurre con las sombras que se disipan cuando se “revela” la luz de la Verdad.
La recesión no afectó a su antiguo empleador ni a mi negocio. Y descubrió que el hecho de escuchar con humildad a Dios en busca de dirección proporciona el camino más seguro para el crecimiento y el bienestar financiero de los negocios.
Yayu ora y el proceso para conseguir su visa es muy armonioso, y su viaje también.
Cuando fue diagnosticada con un caso serio de artritis, Martine se aferró al hecho de que su existencia es espiritual, el verdadero reflejo de Dios. Su curación le demostró que podemos superar cualquier cosa con la oración persistente, sabiendo que la enfermedad y la discordancia no están apoyadas por el Principio o ley divina, y no pueden perdurar.
Cuando Barbara se sintió mal, obtuvo una rápida curación al orar como aprendió en la Ciencia Cristiana. Pronto sintió una maravillosa consciencia de la belleza, la generosidad, la eficiencia y la fiabilidad del Amor divino y, en unos minutos, estuvo completamente bien.
Douglas ora y sana por completo de alergia estacional. Aprendió que cualquier sugestión de que podemos ser menos que los hijos espirituales y perfectos de Dios, es tan infundada como la creencia de que la dirección del viento determina nuestra habilidad para respirar.