Editoriales
Aquel que adora a Dios con profundo entendimiento y no superficialmente muestra por su manera de vivir que se ha elevado por encima de la poca satisfacción que ofrecen las creencias tradicionales y el rito, y siente que tiene una razón verdadera para la devoción. Nuestro gran Ejemplificador, Cristo Jesús, dió muestras de un móvil sincero y genuino para la adoración cuando enseñó a sus seguidores a orar de esta manera: “Venga tu reino.
El valor y el interés de la vida humana se hallan comprendidos dentro del móvil o propósito que la inspira y dirige. Un propósito noble enaltece el empeño humano, presta inspiración a sus proyectos y añade la substancia y el gozo a su cumplimiento.
El reconocimiento de nuestras obligaciones, unido a un sentido del deber, es necesario para obtener éxito en la vida. También debemos sentir amor por nuestras responsabilidades y hacia nuestro prójimo.
Estas notables palabras fueron escritas por nuestra Guía, Mary Baker Eddy: “¿Qué es lo que no ha sido capaz de hacer por la raza el amor abnegado? Todo lo que se ha llevado a cabo y aún más de lo que la historia nos relata” Miscellaneous Writings (Escritos Misceláneos, pág. 238).
Los sacrificios que son esenciales para obtener el bien humano más alto representan un grado muy elevado de desinterés. Aquellos que hoy en día se benefician porque siguen la senda de vida cristiana, se enfrentan con el reto que demanda cualquier sacrificio que sea necesario para elevar el concepto humano de la existencia por encima del nivel del materialismo, a fin de que el cristianismo pueda cumplir con su misión espiritual.
La escena tan variable que presenta el mundo exige muchos ajustes. La manera de vivir, la rápida movilización, la comunicación instantánea, el relacionarse con una variedad de gente, sus religiones, sus costumbres y sus problemas tienen sobre nosotros el efecto de sacudirnos y de extraernos de la complacencia producida por nuestras propias creencias y prejuicios arraigados.
Las personas que averiguan y preguntan acerca de la Ciencia Cristiana [ Christian Science ], a veces se sienten confundidas pues descubren que enseña que Dios es la Mente espiritual que sólo conoce Su propia totalidad y la perfección de Su creación espiritual. Se preguntan cómo puede Dios alcanzar y sanar a la humanidad dado que El no está consciente de los pecados, enfermedades, defectos y flaquezas de los hombres.
Para la mayoría de las personas, la vida humana gira alrededor de un constante esfuerzo por satisfacer las múltiples demandas de sustento y salud, de los deseos humanos y de las demandas de progreso que exige el trabajo que hemos escogido. Dado que la mente humana considera que estas demandas son de naturaleza material, naturalmente trata de satisfacerlas por los medios materiales.
La historia nos ofrece muchos ejemplos de personas que desearon la independencia. Algunos inspirados por el valor fueron capaces de alcanzarla.
La palabra receptividad según se la usa en la Ciencia Cristiana [ Christian Science ], no significa credulidad; es más que la buena voluntad de creer, significa más que la aceptación humilde o sin discriminación de cuanto se nos diga, y ciertamente es más que la obediencia ciega y muy diferente a ésta. La receptividad a la verdad espiritual es el acuerdo espontáneo, íntimo que sentimos con las ideas del bien espiritual; es la hospitalidad instintiva que se da al Cristo.