Editoriales
Cuando nosotros obedecemos a Dios entera y comprensivamente, no podemos hacer nada que nos pondría en una situación de peligro. El cumplimiento de las leyes de Dios confiere una inmunidad siempre en acción contra el peligro, la enfermedad, la desgracia o el desastre.
El pensamiento humano se basa sobre su concepto de la realidad. Ya que la humanidad contempla generalmente la realidad como algo material, todas las ciencias naturales, como asimismo toda la teología ortodoxa, han aceptado la creencia del origen material y la de un universo material supuestamente perpetuador de sí mismo y a un tiempo destructor de sí mismo.
Los relatos de naves del espacio de otros planetas y sus ocupantes que desembarcan en nuestra tierra, los planes y las investigaciones de los hombres con el objeto de lanzar proyectiles que alcancen a otros cuerpos celestiales están hoy día ocupando el pensamiento de la humanidad en grado extraordinario. Bien podríamos formularnos la pregunta: “¿Qué luz arroja la Christian Science Nombre que Mary Baker Eddy dió a su descubrimiento (pronunciado Crischan Sáiens).
Santa Biblia, para mí, eres un tesoro aquí: tú me dices lo que soy; de quién vine y a quién voy. Estas palabras del Himnario de la Christian Science (No.
Una de las lecciones más profundas que hallamos en la Biblia es aquella que nos enseña que nuestra única defensa contra el mal depende de un corazón puro e inocente. David cantó así (Salmo 7:10): “Mi defensa es de Dios, que salva a los rectos de corazón.
En la Christian Science Nombre que Mary Baker Eddy dió a su descubrimiento (pronunciado Crischan Sáiens). La traducción literal de estas dos palabras es “Ciencia Cristiana”.
Mary Baker Eddy hace una profunda e importante contribución hacia la manera de vencer al mal por medio de su definición de “voluntad” en “Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras” (pág. 597).
“El dió su voz, la tierra se derritió,” leemos IT/ en el Salmo cuarenta y seis (verso 6). ¿Qué poder es este que disuelve el materialismo mediante su mera expresión? “Es el Espíritu, el creador y el mantenedor de todo aquello que es bueno, substancial y verdadero,” responde la Christian Science.
Mientras dirigía la palabra en un servicio de Pascua en su Iglesia, Mary Baker Eddy dijo que el servicio le hablaba no de muerte sino de Vida (véase Miscellaneous Writings, pág. 180).
Si fuere posible recorrer el reino de Dios, ¿qué observaríamos? ¿Estaría uno consciente de la materialidad, de las variables y mudables pretensiones mortales, con sus afectos y odios? ¿Habrían noche y pesar, pecado, enfermedad y muerte? ¡No! La Christian Science pone en claro que ninguna de estas evidencias de la materialidad y la mortalidad existen en el reino del cielo. Jesús declaró (Lucas 17:20, 21): “El reino de Dios no viene con manifestación exterior.