La Asamblea Anual de La Iglesia Madre es la ocasión para reafirmar el profundo compromiso cristiano de los miembros respecto a la misión sanadora de La Iglesia Madre en el mundo. Este año, además de la Asamblea Anual donde se dieron informes, compartimos la comunicaión mundial de La Iglesia Madre con amigos y vecinos para los que tuvimos casa abierta durante cuatro días, llamada “A Global Voice” (Una voz global), y que se celebró en la Casa Editora de la Ciencia Cristiana durante el fin de semana anterior a la Asamblea Anual.
El informe de este año de La Junta Directiva de la Ciencia Cristiana se incluyó en un nuevo folleto que estará disponible en todo el mundo en las Salas de Lectura de la Ciencia Cristiana. El título del folleto es “Christian Science: A Report For The 90's” (Ciencia Cristiana: Un informe para los años 90), y fue preparado por lo Fideicomisarios de La Sociedad Editora de la Ciencia Cristiana. El folleto en sí está solamente en inglés. Uno de los acontecimientos más importantes que se informó para el año venidero es el lanzamiento de The Monitor Channel (El Canal del Monitor), un servicio completo por cable, de noticias, crónicas e información para el uso de los sistemas de cable en toda América del Norte.
A continuación siguen textos extractados de los informes presentados durante la Asamblea Anual.
Lecturas que leyó el Presidente saliente,
David E. Sleeper
La Biblia
Marcos 16:9, 14, 15, 17, 18
2 Cor. 4:6
Isa. 40:5
Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras
por Mary Baker Eddy
138:28–31
347:14–22
98:15–22
150:4–9
Acto seguido, la congregación se unió en oración silenciosa y después se repitió en voz alta el Padre Nuestro.
El Sr. Sleeper anunció los nombres de los dignatarios de La Iglesia Madre [a partir del 4 de junio de 1990].
Rev. Mary Baker Eddy
Pastora Emérita.
La Junta Directiva de la Ciencia Cristiana
Harvey W. Wood
Ruth Elizabeth Jenks
John Lewis Selover
Jill Gooding
Richard C. Bergenheim.
Jürgen Kurt Stark
Presidente
Horacio Omar Rivas
Primer Lector
Marion Sheldon Pierpont
Segunda Lectora
Virginia Sydness Harris
Secretaria
Donald C. Bowersock
Tesorero
Comentarios del Presidente entrante
Hace poco, tuve una conversación telefónica con un amigo mío que es miembro de La Iglesia Madre y que vive en Dresden, República Democrática Alemana. Conoció la Ciencia CristianaChristian Science (crischan sáiens) en 1948, poco antes de que la Ciencia Cristiana fuera declarada ilegal. En el curso de nuestra conversación, me mencionó varias veces cómo nuestro pastor dual, la Biblia y el libro Ciencia y Salud por la Sra. Eddy, había sido una continua fuente de fortaleza para él y su familia durante esos largos años en que la oscuridad del materialismo trató de extinguir la luz de la espiritualidad.
Había percibido que jamás podía estar sin la ayuda de su pastor, el cual siempre estaba listo para ayudar y sanar, y el cual, a su vez, lo había capacitado para sanar y ayudar a otros. Como vemos, el ateísmo de la materia había tratado de debilitar su fe en Dios. Pero las verdades de Ciencia y Salud estuvieron fortaleciendo, todo el tiempo, las raíces de su comprensión espiritual. Las enseñanzas de Ciencia y Salud estaban afirmando lo que el materialismo estaba negando, es decir, la omnipresencia de Dios, que es Espíritu, y del hombre como Su linaje espiritual sin una célula física. Ahora, mi amigo ha recibido instrucción en clase Primaria de Ciencia Cristiana y está dedicado activamente a reedificar lo que se conocía como Primera Iglesia de Cristo, Científico, Dresden.
Mi amigo halló su fortaleza en su diaria comunicación con nuestro pastor. Sabemos que nuestra Guía, la Sra. Eddy, recurrió al pastor — la Biblia y Ciencia y Salud— en busca de su diaria nutrición espiritual, manteniendo su consciencia encendida con el conocimiento de la bondad y omnipresencia de Dios. Para ella también fue algo divinamente natural. Y es natural para nosotros profundizar nuestra comprensión de nuestro pastor, mantener nuestros ojos llenos de luz y nuestros pensamientos puros.
¿Recordamos siempre que un corazón agradecido, una mano extendida, un impulso de bondad, una sonrisa amable, un rayo de esperanza, de hecho, cualquier pensamiento divino, son como tantos alientos mentales que van impregnando la atmósfera con curación y regeneración? Es indudable que quien hace más por la iluminación de la humanidad es aquel cuyos pensamientos están en mayor armonía con Dios. Quiera Dios que todos vivamos tan desinteresadamente que jamás haya un momento en que la luz que mora en nosotros pueda ser empañada por alguna forma de error o algún rasgo desagradable.
Hoy en día el llamado es urgente. Es evidente que hay una generación lista para aceptar gustosa al Consolador. Y ¿acaso no es realmente la obra sanadora de todo Científico Cristiano lo que se necesita? Sólo la curación muestra a la humanidad la eficacia práctica de la verdad del ser que nuestro pastor, la Biblia y Ciencia y Salud, está revelando.
Informe del Tesorero
Desde el primer día del año, he tenido la oportunidad de conocer y hablar con varios grupos de Científicos Cristianos en los Estados Unidos y en Europa en reuniones comunales. Sin excepción, esas reuniones proveyeron un foro público para el intercambio de ideas entre el público y yo, y en ocasiones hubo sinceras diferencias de opinión.
Al reflexionar acerca de todas las preguntas que se hicieron y en el intercambio de ideas a que dieron lugar, encontré un pasaje en Escritos Misceláneos que capta la esencia de esas reuniones. Nuestra Guía, la Sra. Eddy, escribe: “Las Escrituras se refieren a Dios como diciendo: 'Venid luego,.. . y estemos a cuenta'. No existe sino una sola Mente cabal, y esa es la que debiera gobernar al hombre, y sí lo gobierna”.
Esas reuniones me dieron mucha inspiración y un claro sentido de la prudencia de seguir explícitamente la dirección de nuestra Guía respecto a la información de las finanzas en la Asamblea Anual. La Sra. Eddy nos brinda esa guía en el Manual de la Iglesia, en el Artículo XXIV, Secciones 3 y 4. Yo diría que la mente mortal trataría de convencernos de que los datos financieros son más eficaces para medir nuestro progreso que el cumplimiento de nuestra misión. Aceptar esa afirmación desviaría nuestra atención de la obra esencial de la Iglesia, que es cumplir la profecía que la Sra. Eddy da en Pulpit and Press.
En nuestra vida personal sabemos que nuestra provisión diaria es el resultado de demostraciones diarias. Lo mismo es verdad respecto a La Iglesia Madre, y los fondos operativos son los recursos disponibles para responder a las necesidades diarias de la Iglesia. Esos fondos existen como resultado de las generosas contribuciones de los miembros. Les agradecemos vuestro continuo apoyo, el cual es superior este año al del año pasado.
Estén seguros de que nunca reduciremos los saldos de los fondos operativos a niveles que comprometan la capacidad de la Iglesia para cumplir con sus obligaciones. Además, como hemos informado en años pasados, La Iglesia Madre no tiene deudas de ninguna clase, incluso el Sindicato de The Christian Science Monitor, Inc., el subsidiario de la televisión y de la radio de onda corta de la Iglesia.
El siguiente es nuestro informe financiero para el año fiscal que terminó el 30 de abril de 1990. El valor contable de los fondos operativos de La Iglesia Madre al 30 de abril de 1990, era de $145 millones de dólares, inferior a los $168 millones del año pasado. La reducción del saldo de los fondos operativos fue planeado, y ocurrió para apoyar el comienzo y el crecimiento continuos de nuevas actividades en La Iglesia Madre.
Se espera que la televisión, así como la revista World Monitor, finalmente generen suficientes ganancias no sólo para satisfacer sus costos, sino para superarlos. La radio de onda corta es un medio de comunicación con la humanidad. No se esperaba que generara ganancias, de manera que su costo siempre se pagará con los fondos operativos de La Iglesia Madre. De allí, nuestra petición a cada miembro en la carta de la capitación de este año, como también en la carta de diciembre de 1988.
Los gastos del año fiscal que terminó el 30 de abril de 1990, fueron de $108 millones, o sea inferiores a los $138 millones del año pasado. Aun cuando nuestros gastos se han reducido durante el último año fiscal como se planeó, fueron superiores al pronóstico de $94 millones que se presentó en la Asamblea Anual del pasado, principalmente porque decidimos acelerar el inicio de la nueva programación de televisión. Esperamos que en el futuro estos programas estén disponibles en otras ciudades y en el exterior.
Para concluir mis comentarios, me gustaría compartir una experiencia que tuve en mayo en la República Democrática Alemana. Tuve reuniones con varios grupos de Científicos Cristianos. Durante esos intercambios de ideas, ellos expresaron su profunda gratitud por La Iglesia Madre y por el apoyo que recibieron durante todos estos años. No obstante, lo que sentí, y se lo expresé a ellos, fue nuestra gratitud por su firme práctica de la Ciencia Cristiana ante las continuas sugestiones de que sus esfuerzos eran inútiles. Ellos sabían que era su fidelidad a la verdad lo que finalmente vencería toda resistencia, y la ha vencido. Ellos demostraron que “no existe sino una sola Mente cabal, y ésa es la que debiera gobernar al hombre, y sí lo gobierna”.
Estoy humildemente agradecido a esos Científicos Cristianos por su fidelidad, valor, y total y desinteresada dedicación. Y, a cada uno de ustedes, gracias por vuestra dedicación y bondadoso apoyo a La Iglesia Madre.
Informe del Comité de Publicación
La Sra. Eddy nos recuerda en Ciencia y Salud que cuando el humo de la batalla se disipe, entonces percibiremos el bien que hemos hecho. Desde la perspectiva del Comité de Publicación puede ser que todavía haya bastante humo al derredor, pero el acontecimiento verdaderamente significativo es que el humo está empezando a disiparse.
Echemos una mirada a las diversas áreas donde las brisas, o las corrientes de la Verdad, están purificando el aire.
A medida que los Comités de Publicación trabajan sinceramente para explicar a los legisladores la eficacia del tratamiento en la Ciencia Cristiana y la importancia de la libertad religiosa, está surgiendo una creciente adaptación para la curación por la Ciencia Cristiana. Este año, un gran número de nuevas leyes fueron adoptadas que fortalecen la posición de aquellos que recurren a Dios para su bienestar.
Aquellos de ustedes que han estado leyendo periódicos de los Estados Unidos han notado algunas cosas serias que se han escrito acerca de la práctica de la curación espiritual este año. Por ejemplo, un columnista en un periódico arguye: “El derecho de preferir la oración en lugar de la medicina.. . no debe extenderse a los niños.. .” The Boston Herald, 16 de abril de 1990. Acusó a padres Científicos Cristianos de poner en riesgo a sus hijos. Su acusación estaba basada en la suposición de que la oración no podía ser una medicina eficaz, un modo eficaz de tratamiento.
Y, no obstante, otro columnista puso el asunto más en perspectiva. Escribió: “No es como si [los padres] no hubieran hecho nada. En su mente y corazón ellos buscaron el tratamiento final: oraciones a Dios para la curación y restablecimiento de su hijo”.
“Los Científicos Cristianos usan la Biblia como la fuente de su fe y práctica”, explicó además. “Aquellos que se mofan de los Científicos Cristianos sobre bases religiosas debieran recordar que en las escrituras se informa, con bastante credibilidad, que Jesús de Nazaret hizo ver a los ciegos, caminar a los cojos, y levantar a los muertos de la tumba”.Northeast Mississippi Daily Journal, 6 de mayo de 1990.
Como podemos ver, la crítica trae, con frecuencia, una respuesta inesperada, respuesta que podría describirse como está en el Apocalipsis “la tierra ayudó a la mujer”.
Esta misma secuencia puede ocurrir cuando el humo y el proceso purificador se extiende de las páginas de los periódicos a las ondas de transmisión de la radio. Una persona, que llamó por teléfono a un programa de entrevistas por radio, dijo que ella no era Científica Cristiana, pero al escuchar el programa se sintió como una hipócrita. Aquí estaban esos Científicos Cristianos poniendo en práctica realmente lo que Jesús predicó acerca de sanar a los enfermos, mientras ella y el resto de la sociedad estaban simplemente hablando acerca de lo que Jesús predicó.
Muchos programas de televisión se han unido al conflicto y presentado preguntas acerca de la práctica de recurrir a Dios en procura de curación. Pero algo de ese humo se está disipando también. Por ejemplo, hace poco participé en un programa de televisión sobre la curación espiritual con un ministro metodista, un rabino, un sacerdote católico romano y un ministro bautista. El programa fue patrocinado por el presidente de una universidad.
Después del programa, el sacerdote expresó profunda compasión por los padres Científicos Cristianos y dijo: “Sencillamente hay demasiada ignorancia acerca de la curación por la Ciencia Cristiana. Todos necesitamos comprenderla mejor”.
Con frecuencia la gente me pregunta si la oposición mayor contra la curación mediante la oración viene principalmente de los médicos. Bueno, no creo que sea tan sencillo. Es verdad que organizaciones médicas se han opuesto con frecuencia al reconocimiento legal de la curación espiritual, pero individualmente los médicos a menudo han tenido sus fuertes dudas, como muchos lo han expresado, de arrojar la primera piedra a la Ciencia Cristiana.
Hace algunos meses fui invitado a participar en un simposio anual en una escuela de medicina. Me brindó la oportunidad de hablar sobre la Ciencia Cristiana con médicos, enfermeras y estudiantes de medicina. Debo decir que sentí un aprecio muy especial por muchos de los estudiantes de medicina que conocí y con los cuales hablé. Aun cuando teníamos métodos muy diferentes para tratar la enfermedad, la razón para obtener curación que teníamos en común brindó la oportunidad única de establecer algunos puentes de comunicación.
Durante décadas ha habido malentendidos acerca de la mujer que colocó la curación espiritual moderna sobre una base firme. Pero algunos de esos conceptos erróneos se están desvaneciendo a medida que un documental sobre Mary Baker Eddy, ganador de un premio, se exhibe cada vez más en estaciones de televisión locales alrededor de los Estados Unidos, y ahora también en otros países.
Hace cerca de cien años la Sra. Eddy escribió una carta que tiene un significado especial para los Científicos Cristianos hoy en día. Se halla en su libro Escritos Misceláneos. Esta carta es importante porque fue escrita a un Científico Cristiano enjuiciado por recurrir a Dios en procura de curación espiritual. Permítame leer sólo algunas frases:
“Mi querido alumno: — Es gran mérito ser hallado digno de sufrir por Cristo, la Verdad. Pablo dijo: 'Si sufrimos, también reinaremos con él'”. Y después concluye la carta: “El error no tiene poder sino para destruirse a sí mismo. No puede dañarlo; no puede detener las eternas corrientes de la Verdad. Como siempre con afecto, Mary B. G. Eddy”.
Poco a poco, la sociedad está descubriendo que su propio cristianismo tiene algo más práctico, más inmediato, de lo que la mayoría de los cristianos han comprendido. El cristianismo incluye una Ciencia de curación espiritual, y nuestra Iglesia está aquí para promover y fortalecer para todos los cristianos la Ciencia que por derecho pertenece a todos los cristianos, incluso a toda la humanidad.
Informe de la Secretaria
Ha sido un privilegio muy especial trabajar como Secretaria de La Iglesia Madre este año pasado y ser testigo del amor extensivo de esta Iglesia.
Mi reciente visita a varios países: República Democrática Alemana, Checoslovaquia, Hungría, Letonia y la Unión Soviética ha sido muy significativa. Recuerdo una reunión celebrada en la ciudad de Chemnitz [este es el antiguo nombre de la ciudad que recientemente le fue restituido]. Se celebró tres días después que el gobierno de Alemania Oriental reconoció oficialmente a la Ciencia Cristiana como una religión, y justo tres días antes de la caída del Muro de Berlín. Este reconocimiento fue el primero concedido a religión alguna en Alemania Oriental en treinta y ocho años.
Recuerdo muy bien a los amigos que llenaron por completo un cuarto pequeño. Alegría y expectación iluminaron la fortaleza que los sostuvo durante los años en que mantuvieron la Ciencia Cristiana cerca de sus corazones. Su vida brilló como poderoso ejemplo de fortaleza y eficacia para consolar y sanar bajo toda clase de circunstancias. Así como los primeros cristianos lo descubrieron en el “aposento alto”, el poder espiritual es un hecho verdadero.
Después seguí hacia Letonia, donde unos pocos trabajadores en verdad muy calladamente practican la curación espiritual. Trabajadores que oran solos, pero que jamás se sienten desalentados; esas vidas sencillas dedicadas a la genuina oración activa, expresan fortaleza y esperanza a vecinos, diseminando de esa manera las buenas nuevas de curación de unos a otros.
Me alegra informar que con el creciente interés en la Ciencia Cristiana por todo el mundo, como en años recientes, las solicitudes de afiliación a La Iglesia Madre han permanecido firmes. Este año fueron aceptados nuevos miembros de cuarenta y cinco países. Esos son más países de los que hemos tenido en varios años; y fue en Europa Oriental donde se evidenció el crecimiento mayor. Si bien el creciente interés en algunas partes del mundo es natural y alentador, se necesita sincera oración al encarar y evitar la disminución en otras partes del mundo.
Los jóvenes continúan ampliando su sentido de comunidad mediante varias reuniones en América Latina, celebradas con el propósito de descubrir soluciones espirituales para los problemas de hoy en día. En julio se celebraron reuniones en Australia y Nueva Zelanda.
Además, Africa del Sur y Europa patrocinaron dos reuniones similares, aunque sin precedentes. Diez países de Africa Meridional se reunieron en julio. Veinte países de Europa Oriental y Occidental se reunieron en Hamburgo en septiembre. Porciones de esas reuniones fueron transmitidas por onda corta. La intuición espiritual de cada región se expresa a medida que los comités locales de planeamiento y organizaciones en las universidades, abren estas reuniones al público en general — invitando a amigos, vecinos, compañeros de trabajo — y ajustando los temas y estructura general a las necesidades de hoy en día.
El año pasado se celebraron reuniones en Uruguay, la República Federal de Alemania, Gran Bretaña, y en partes de los Estados Unidos para aquellos miembros activamente interesados en la práctica de la Ciencia Cristiana.
Los miembros continúan comunicándose con sus vecinos y su comunidad. Algunos están ampliando su disponibilidad en sus respectivas comunidades anunciándose públicamente como practicistas de la Ciencia Cristiana. Un practicista que se anunció recientemente escribió: “En 1987 tenía el deseo de crecer espiritualmente, no necesariamente con la intención de dedicarme a la práctica pública; sencillamente sabía que necesitaba estudiar, aprender y crecer como nunca antes lo había hecho. Entonces.. . empezaron a llamarme solicitando ayuda por medio de la oración”.
De hecho, los practicistas que se anuncian por primera vez representan la voz global que viene de trece países diferentes. Este año, algunas de las curaciones que han sido relatadas por practicistas incluyen asma, espalda quebrada, cálculos biliares, cadera dislocada de nacimiento, sarampión, cáncer de pecho, quiste médicamente diagnosticado, infección renal, tuberculosis pulmonar, enfermedad mental y gonorrea.
Los miembros de las iglesias locales están hallando maneras sanadoras y creativas para ampliar su compromiso con la comunidad. Se relata la experiencia de Primera Iglesia, Farmington, Nuevo México, sobre cómo los maestros de la Escuela Dominical decidieron invitar a maestros de escuelas públicas a participar en tres reuniones inspiracionales mensuales. Los maestros de escuela formaron una mesa redonda para identificar los desafíos más grandes que enfrentaban en el salón de clase. La reunión fue muy informativa para los miembros de la iglesia, y sus oraciones se volvieron específicas para apoyar a los maestros de escuela y a los alumnos. Las mejoras en el sistema escolar fueron evidentes manifestándose en más orden y disciplina, como también en el mejoramiento en la estructuración presente. La iglesia fue bendecida también, pues los maestros de la Escuela Dominical y los alumnos han crecido tanto en número como en espiritualidad.
Por todo el mundo, las conferencias de las iglesias han echado abajo barreras que trataban de impedir que nuestros vecinos comprobaran la naturaleza práctica de la Ciencia Cristiana.
Un resultado natural de esta actividad de desarrollo de las conferencias es que estamos mejor capacitados para ayudar al prójimo que viene a nuestra puerta. Este deseo de abrir nuestra puertas a nuestro prójimo ha sido particularmente evidente en Boston, en una de las cuatro Salas de Lectura de La Iglesia Madre. Durante los últimos once meses, desde que abrió sus puertas, esta Sala de Lectura ha tenido más de diez mil visitantes. Se están presentando muchas oportunidades como nunca antes para compartir, es decir, para hablar con nuestro prójimo sobre la naturaleza práctica de la Ciencia Cristiana. Este año que viene, continuemos ampliando nuestra comunicación de una manera confiada y consagrada. Preguntémonos: ¿Estoy dispuesto a amar a mi prójimo como a mí mismo? ¿Estoy dispuesto a servir a mi prójimo y a mi comunidad como Científico Cristiano?
Informes del Movimiento
[Original en español]
Hace cerca de un año, un hombre que pasaba con frecuencia frente a la iglesia tomó un ejemplar de El Heraldo de la Ciencia Cristiana y lo guardó en su casa junto con otros libros. Este hombre empezó a tener graves problemas nerviosos de manera que le era difícil trabajar. Fue a ver a un médico, quien le dijo que tomara diez píldoras por día. Pero empeoró. Finalmente, un día, buscando un libro en su casa, encontró el Heraldo y lo leyó por completo. Cuando terminó de leerlo, se sentía como si fuera otro hombre; había sanado. Por supuesto, empezó a venir a nuestra iglesia todos los miércoles y los domingos. Dio un testimonio en el que relató esta curación. Ahora tiene la Biblia y el libro de la Sra. Eddy, Ciencia y Salud, y estudia la Lección-Sermón con regularidad.
Otro caso se refiere a un hombre que también tomó un Heraldo. Este hombre es casado y tiene hijos. Uno de ellos sufría de asma. Aun cuando pertenecen a otra religión, puso en práctica lo que había leído en el Heraldo para ayudar al niño enfermo, y su hijo se calmó y durmió toda la noche. Aun cuando no asiste a los cultos, vino un miércoles a dar testimonio de todo esto.
[Original en portugués]
Hace veintidós años mi madre estaba constantemente enferma y se diagnosticó que tenía una grave enfermedad cardíaca. Ciando mi padre fue al departamento de salubridad para registrarla para que la operaran, la persona que lo atendió le recomendó la Ciencia Cristiana. Mis padres fueron a ver a una practicista. Jamás olvidaré cómo regresó a la casa después de la visita; estaba muy entusiasmada y su rostro brillaba. Gradualmente mi madre mejoró, hasta que sanó por completo. Ella y yo nos unimos con otras cinco personas del lugar para celebrar servicios de la Ciencia Cristiana en el garaje.
Celebrábamos cultos y teníamos una Escuela Dominical y finalmente nuestro grupo se convirtió en sociedad. Mi madre llegó a ser practicista pública de la Ciencia Cristiana, y nuestra sociedad llegó a ser Primera Iglesia de Cristo, Científico, São Caetano do Sul. Ahora tiene muchos miembros y una Escuela Dominical muy activa.
Después de la curación de mi mamá, muchos de nuestros parientes se hicieron miembros de la iglesia. Un primo mío es practicista de tiempo completo, y ahora yo también soy practicista público.
Hace algún tiempo, en enero, recibí una carta de un hombre del cual jamás había oído, Don Rodrigo, de un pueblito llamado San Miguel de Barrosas. La letra y ortografía con que estaba escrita la carta era de una persona casi analfabeta. Resultó ser primo de un practicista que conozco en California. Aun cuando no se conocen, el practicista de la Ciencia Cristiana le había enviado a Rodrigo un ejemplar de Ciencia y Salud en español y mi nombre y dirección. En esta carta él decía que estuvo leyendo Ciencia y Salud y que había tenido una curación maravillosa. Quería dar su vida a la práctica de la Ciencia Cristiana, y quería que fuera y lo ayudara a comprenderla. Salí de mi ciudad de San Pedro Sula a las 2:30 de la mañana y llegué allí a las 11:30 a.m.
Su esposa, Adelina, me contó su historia: su esposo le había enseñado a leer. Al comienzo ella no le dio mucha importancia al estudio que él estaba haciendo de este nuevo libro, pero cuando recibieron mi primera carta, su esposo no estaba, así que ella la abrió y empezó a leer el folleto que yo había enviado. A medida que lo leía sanó de un dolor de cabeza, así que estaba muy impresionada.
La hora para reunirnos eran las 5 de la tarde, justo cuando empezó a llover. Rodrigo dijo que esperaba a ocho o diez personas, pero yo conté más de treinta y cinco. Hablé con toda sinceridad durante veinte o veinticinco minutos; todos escucharon atentamente y unos pocos hicieron preguntas.
Durante los pocos meses siguientes recibí dos cartas más de Rodrigo, rogándome que volviera. Cuando volví, era obvio que había progresado en su comprensión y anhelaba hacer todo lo que fuera necesario para aprender más acerca de la Ciencia Cristiana. Nuevamente, unas treinta y cinco personas se presentaron, pero esta vez algunas hicieron preguntas mejor pensadas; algunas querían saber cómo estudiar. Después de la reunión dije que al día siguiente (domingo) iba a haber un servicio religioso allí, y después de que se fueron insistí en que Rodrigo aprendiera a leer la Lección-Sermón del Cuaderno Trimestral de la Ciencia Cristiana. A la mañana siguiente, cerca de veinte personas asistieron a la lectura de nuestra lección, y después rápidamente pidieron los pocos ejemplares de la Biblia, Ciencia y Salud y del Trimestral que yo había llevado conmigo.
Una carta típica [originalmente en francés] a La Iglesia Madre de un radioescucha de la onda corta en Togo:
Estimado Gerente, ¡Hola!
Sus dos envíos [de libros y literatura] llegaron a salvo. Es imposible expresar mi alegría en papel. Empecé a comprender inmediatamente que no estaba en el camino correcto hacia la salvación aun cuando me consideraba un cristiano. Estaba orando muy equivocadamente, pues estaba pidiendo a Dios que me concediera cosas materiales, en lugar de buscar el reino de Dios ante todo.
Cosas que no había comprendido antes, ahora me parecen muy claras a medida que progreso en mi lectura de Ciencia y Salud, y estoy sinceramente agradecido a Dios por haber traído este libro maravilloso a mi vida.
Sinceramente,
Fuerza de Policía Nacional
[Original en alemán]
En octubre de 1988 nuestro hijo menor, que en ese tiempo tenía dos años y medio, enfermó de hernia. Habíamos notado esta hernia antes, pero no había recibido tratamiento médico, porque no había obstaculizado sus movimientos.
Un sábado, en que nuestros parientes estaban de visita, esta hernia empeoró rápidamente de manera que nuestro hijo no podía moverse.
Por lo tanto, mi esposa llevó al niño al médico de guardia más cercano. El médico apremió a mi esposa para que hiciera operar al niño en el hospital más cercano debido a la gravedad de la enfermedad.
Por amor a nuestro hijo, consideramos si tal operación era algo en que debíamos consentir. Recordamos a una conocida nuestra, una Científica Cristiana que había efectuado muchas curaciones mediante la oración solamente.
Mientras tanto, mi esposa llamó a la Científica Cristiana quien aceptó brindar ayuda inmediata. Pocos minutos después de la llamada telefónica el niño resbaló de mi regazo. Sus primeros pasos fueron un poco inciertos, pero pronto andaba saltando por la casa con los otros niños. Pronto la curación fue completa, y hoy en día no hay vestigio alguno de la enfermedad.
Toda nuestra familia ha recibido multitud de bendiciones en todo aspecto de nuestra vida. Yo estoy especialmente agradecido por haber sido merecedor, durante este año pasado, de ser admitido como miembro de La Iglesia Madre.
Nuevo Presidente de La Iglesia Madre
El Dr. Stark nació en Chemnitz, Sajonia, en lo que es ahora la República Democrática Alemana. Se doctoró en lenguas semíticas en la Universidad Johns Hopkins, Estado de Maryland, Estados Unidos, y enseñó en el Trinity College, Dublín, República de Irlanda, y en la Universidad de Leeds en Inglaterra. Ahora se anuncia en el Journal como practicista en Boston.
Ha trabajado en La Iglesia Madre durante muchos años, especialmente en actividades en el exterior. De 1972 a 1983, el Dr. Stark dio seminarios sobre la Biblia en nombre de La Iglesia Madre en Europa, Asia, Africa, Australasia y América del Sur.
Y ahora miremos hacia el futuro
Reimpreso del folleto Christian Science: A Report For The '90s Looking ahead to the 21st Century (La Ciencia Cristiana: Un informe para los años 90 miremos hacia el siglo 21).
Casi a fines del siglo XIX, un diario de Chicago expresó: “La historia muestra el hecho curioso de que los últimos años de un siglo son años de una vida más intensa, que se manifiesta o bien en inquietud o en aspiración.. . ” Entonces, tal vez, no sea sorprendente que los últimos años del siglo XX no sean una excepción a este fenómeno humano.. . especialmente cuando esto también marcará el final del segundo milenio.
No hay palabras que ilustren mejor la naturaleza de los cambios extraordinarios que están ocurriendo hoy, que las que escribió Mary Baker Eddy en el Prefacio de Ciencia y Salud a fines del siglo pasado:
“Ha llegado la hora de los pensadores. La Verdad, independiente de doctrinas y de sistemas consagrados por el tiempo, llama a las puertas de la humanidad. La conformidad con el pasado y el frío convencionalismo del materialismo se están desmoronando. La ignorancia de lo que es Dios ya no es el puente hacia la fe. La única garantía de obediencia a Dios es una comprensión correcta de El, y conocerle a El correctamente significa Vida eterna. Aunque caigan imperios 'reinará Jehová para siempre' ”.
En esta era que avanza, la espiritualidad no puede ya ser descartada como incompatible con la civilización y con el progreso individual y colectivo del hombre. La espiritualidad es la mejor amiga de la civilización. La oración es el medio dado por Dios para cultivar dicha espiritualidad y aplicarla a todas las necesidades humanas. Los hombres, mujeres y niños de los siglos 20 y 21, serán bendecidos a medida que abran más ampliamente la puerta al llamado de la Verdad.
De esta manera, con el poder y el impulso espirituales, la humanidad puede esperar confiadamente el final de un siglo y el comienzo de otro.
La Sociedad Editora de la Ciencia Cristiana/Progreso en los años 90
La Administración Fideicomisaria de La Sociedad Editora de la Ciencia Cristiana tiene una misión esencial, como administración corporativa, al guiar las normas y programas de la Sociedad en estrecha cooperación con el Gerente quien es jefe ejecutivo.
La Sociedad Editora tiene a su cargo presentar sus publicaciones religiosas y noticiosas en los medios de información contemporáneos, tal como Mary Baker Eddy usó los medios de información contemporáneos de sus días. Los medios de información de los años 90 incluyen las tecnologías de impresión, radio, televisión y telecomunicaciones que brindan la capacidad para mantenernos al día con el ambiente de comunicaciones e información que está cambiando rápidamente.
Las declaraciones sobre la misión que la Sra. Eddy dio a las publicaciones periódicas siguen vigentes, y han demostrado ser las declaraciones que nos permitieron poner en marcha nuestra nueva y modificada actividad editorial en sus distintas manifestaciones.
JOURNAL “.. . dejar constancia de la Ciencia divina de la Verdad”.
SENTINEL “.. . mantener guardia sobre la Verdad, la Vida y el Amor”.
HERALDO “.. . proclamar la actividad universal y disponibilidad de la Verdad”.
MONITOR “.. . difundir indivisa la Ciencia que opera inagotablemente.. . no hacer daño a ningún hombre, sino bendecir a toda la humanidad”.
La misión editorial no se detiene con los mensajes que salen de la Sociedad. Ella incluye a los que reciben los mensajes: la gente que los lee, los ve y los escucha como ciudadanos activos del mundo. Esos mensajes son para aquellos que oran para responder a las necesidades del mundo, que quieren orar en bien de ellos mismos, que quieren estar más informados acerca de la aldea global que cada vez es más y más pequeña.
“A Global Voice” (Una voz global)
En lugar de dar un informe durante la Asamblea Anual, La Junta Directiva de la Ciencia Cristiana consideró que éste era un momento para que la Sociedad Editora mostrara a nuestros miembros y a nuestros vecinos el alcance total de sus actividades editoriales en el mundo.
Este era un momento para abrir nuestras puertas al público y compartir con él, junto con nuestros miembros, lo que se ha logrado durante los últimos seis años. Estos logros incluyen sistemas de comunicación que ahora llegan a más de nueve millones de personas alrededor del mundo cada semana con una corriente continua de noticias, informaciones, análisis de The Christian Science Monitor e inspiración espiritual de nuestras publicaciones periódicas. Con esta tecnología ahora en uso, la “Voz global”, con exhibiciones y presentaciones de estas actividades editoriales, nos da la oportunidad de compartir de manera más completa nuestro continuo compromiso con el interés de nuestra Guía de responder a las necesidades de la humanidad.
Las exhibiciones y presentaciones permanecerán en la Casa Editora y a su alrededor durante el verano y otoño. Ellas cubren cada una de nuestras actividades editoriales mostrando cómo se desarrollan nuestras publicaciones día a día, y también brindan la oportunidad de conocer a los que trabajan en nuestra Sociedad Editora. Hay exhibiciones individuales para el periódico, The Christian Science Monitor; la revista mensual, World Monitor; las publicaciones periódicas, el Christian Science Sentinel, The Christian Science Journal, El Heraldo de la Ciencia Cristiana, el Cuaderno Trimestral de la Ciencia Cristiana; todos los escritos de la Sra. Eddy y otras publicaciones impresas; todas las actividades de la televisión; y todas las actividades de la radio. Los kioscos que están afuera relatan la historia de la iglesia, la vida de la Sra. Eddy y su interés por la humanidad, la curación por la Ciencia Cristiana, la Escuela Dominical y otras actividades de la iglesia.
Se preparó un video especial: “24 Hours: A Global Voice” (24 horas: Una voz global), el cual, en cerca de veinte minutos, da una idea de lo que podría ser un día típico en la Sociedad Editora en cada uno de nuestros aspectos de publicación. Este video estará disponible para las filiales de países de habla inglesa.
Una actividad especial, que se llevó a cabo el sábado 2 de junio por la noche, llamada “An Agenda for the '90s” (Agenda para los años 90), tomó la forma de una reunión comunal. Su intención fue la de ayudar al público a pensar en varios asuntos muy importantes que el mundo está enfrentando en los años 90. Un estudio reciente de las Naciones Unidas identificó como aspectos de interés preferencial cinco de los temas tratados: los derechos humanos, la ayuda global, el ambiente, las drogas y el crimen, y la paz en el mundo. Agregamos un sexto aspecto, los medios de información, porque nuestro interés especial es la publicación, y por la continua necesidad de que haya puntos de vista instruidos, cuidadosos y exactos acerca del mundo que promuevan comprensión y mejores condiciones para la humanidad.
Grupos de expertos se reunieron para tratar sobre estos temas, incluso corresponsales del Monitor. El programa se televisó en vivo en nuestra estación de televisión local en Boston, y más tarde se incluyeron segmentos del mismo en el programa regular One Norway Street, que se transmite en muchas partes de los Estados Unidos.
También, como parte de “Una voz global”, hubo una reunión especial el lunes 4 de junio por la noche, titulada “Can I Talk to Your Pastor?” (¿Puedo hablar con su Pastor?) Esta edición especial de El Heraldo de la Ciencia Cristiana fue grabada en video para televisión. Sus anfitriones fueron Olga Chaffe y David E. Sleeper. La reunión compartió ideas acerca de la Biblia y Ciencia y Salud por la Sra. Eddy, a través de las observaciones y experiencias de los anfitriones y sus invitados, quienes son Científicos Cristianos experimentados.
Se ha enviado a las filiales y sociedades una carta anunciando que están disponibles las cintas grabadas de la Asamblea Anual: “¿Puedo hablar con su Pastor?” y “24 horas: Una voz global”. A las exhibiciones y actividades de “Una voz global” asistieron muchos miembros que visitaron Boston para la Asamblea Anual, así como también turistas y muchos vecinos y miembros de la comunidad que descubrieron la Sociedad Editora por primera vez.