Casi cualquier persona que tiene una computadora seguramente habrá visto esta instrucción al menos una vez al descargar e instalar actualizaciones: “Por favor, mantenga su computadora encendida”. Estas actualizaciones garantizan la protección contra los virus al cerrar posibles brechas de seguridad en el software y mejoran el funcionamiento de las aplicaciones. Se pueden descargar en cualquier parte del mundo donde haya conexión a Internet.
La última vez que leí este mensaje en mi pantalla, se me ocurrió que podría haber paralelismos entre esto y mi creciente comprensión de Dios y mi naturaleza como Su semejanza espiritual. Me fascinó la idea de que a través de la oración podía ver mi conexión con Dios en cualquier lugar, y obtener “actualizaciones” en forma de progreso espiritual, curaciones, guía y protección divinas. Aunque oré con esta idea durante varios días, no fue acompañada por una verdadera inspiración. Sin embargo, estaba seguro de que el mensaje de la computadora me estaba haciendo avanzar en mi progreso espiritual, así que decidí seguir pensando en esto.
Mi búsqueda fue recompensada cuando hice una distinción importante: La computadora y su sistema operativo eran materiales, mientras que la verdad acerca de mí y todos los demás como la imagen y semejanza de Dios era espiritual.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!