
Para jóvenes
De esta curación de dolor y malestar en las piernas Camille aprendió que prestarle toda la atención a su oración le ayuda a “cerrar la puerta” al problema mucho más rápidamente.
¿Qué haces cuando oras y la curación no se produce de inmediato? ¿Te criticas a ti mismo? ¿Te das por vencido? Este autor ofrece un enfoque distinto: Obtener una perspectiva diferente respecto al “trabajo” sanador.
Durante una expedición por la montaña en bicicleta, ella se sintió atemorizada y luchaba con una situación que no podía controlar. ¿Qué podemos hacer cuando nos encontramos igualmente abrumados? Esta autora explica cómo el comprender más acerca de Dios y nuestra relación con Él, nos abre el camino para salir victoriosos.
Cuando las cosas en el campamento para escalar no salieron según lo planeado, esta adolescente se dio cuenta de que obligarse a superar su temor a las alturas no iba a funcionar; ella tenía que orar.
Al tener dolor en sus tobillos durante una caminata, esta consejera en entrenamiento quiso sanar por medio de la oración, pero le preocupaba que la curación tomara tiempo. Un discernimiento espiritual le demostró que estaba equivocada, y la liberó.
¿Es que nuestras oraciones individuales pueden producir un cambio favorable cuando se trata de las cosas grandes que suceden en el mundo? Esta autora dice que sí, y explica por qué lo sabe.
Durante un vuelo internacional, esta adolescente comenzó a entrar en pánico cuando no podía recordar una información crítica que necesitaba para llegar a su próximo destino. Sin embargo, lo que sí recordó fue orar. Me embargó un sentimiento tangible de paz y amor.
Ella pasó toda su vida como gimnasta, así que cuando esta estudiante de bachillerato decidió terminar esa carrera, se enfrentó a una pregunta incómoda: ¿Quién soy yo ahora?
Esta estudiante de último año del bachillerato debería haberse sentido entusiasmada con la graduación y su próxima experiencia universitaria, pero en lugar de eso, se sentía menos que los demás e indigna. Obtener una comprensión espiritual del valor que Dios le ha otorgado, la ayudó a frenar las comparaciones y encontrar un sentido de valía más profundo y duradero.
Cuando no había cupo disponible para que diera un examen importante, este adolescente no se enojó ni se dio por vencido. Se apoyó, en cambio, en lo que había aprendido en la Escuela Dominical de la Ciencia Cristiana para orar por la situación, y muy pronto obtuvo resultados.