
Relatos de curación
Muchas han sido las maravillosas experiencias que he tenido en la Ciencia Cristiana. A través de los años he experimentado curaciones físicas, así como también el hecho de vencer la timidez, situación que me había perturbado desde mi infancia.
Dijo Cristo Jesús: “Yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre” (Juan 14:16). La Ciencia Cristiana Christian Science: Pronunciado Crischan Sáiens.
Desde que apareciera publicado mi primer testimonio en el año 1939, he recibido muchas bendiciones por medio del estudio y la aplicación de la Ciencia Cristiana. Durante el transcurso de estos años he sido sanada de muchas dolencias por medio de la oración.
Hace algunos años mi marido se enfermó repentinamente y falleció. Yo quedé aturdida y desconsolada.
En una ocasión comencé a sufrir la inflamación de una glándula. El dolor y la náusea causados por esta condición eran tan severos que me sentí imposibilitado de declarar la verdad por mí mismo.
Habiendo recibido gran ayuda de un testimonio que apareció en un Christian Science Sentinel, es por lo que con alegría y profunda gratitud a Dios y a la Ciencia Cristiana Christian Science: Pronunciado Crischan Sáiens. paso a relatar una maravillosa curación que tuve de un tumor que fue diagnosticado por los médicos como cáncer de la garganta.
En Ciencia y Salud (pág. 66) Mrs.
Durante los últimos cuarenta y dos años, y quizás más, he estado leyendo los testimonios de curaciones que aparecen en los periódicos de la Ciencia Cristiana. En este lapso de tiempo yo mismo he experimentado muchas curaciones.
Durante mi permanencia en un país asiático me vi aquejado súbitamente por una seria y dolorosa infección a la cara. Me dijeron que esta clase de infección era muy común en el país donde me encontraba y que debía ponerme en contacto con un médico inmediatamente para recibir tratamiento.
Hace más o menos unos treinta años fui sanada de un tumor interno. Antes de buscar ayuda en la Ciencia Cristiana Christian Science: Pronunciado Crischan-Sáiens.