Cuando por primera vez conocí la Christian Science, era esclavo de todos los llamados placeres mortales conocidos por los humanos. La pérdida de estos falsos deseos ha sido para mí una gran bendición.
Estoy muy agradecido por la comprensión que ahora poseo de Dios y de mi relación con El, como lo enseña el libro de texto, Ciencia y Salud, por Mrs. Eddy. He aprendido que mi única ocupación consiste en reflejar a Dios, en ser Su imagen y semejanza. Todo el bien se manifiesta para nosotros a través de Sus ideas espirituales siempre asequibles, y cuando ponemos estas ideas en práctica en la vida diaria experimentamos la abundancia.
Siempre que me siento tentado a creer que mis negocios no marchan bien, yo sé que el único remedio es el de contemplar al hombre como perfecto y espiritual, y expresar lo mejor que puedo las cualidades de Dios.
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