Los siglos caen, cadenas no hay,
¡gloria a Dios!
Quien hace aquí Su voluntad
saciado es.Himnario de la Ciencia Cristiana, N.° 160.
Mary Baker Eddy
Muy fácilmente nos sentimos insatisfechos con nuestra apariencia, vestuario, posesiones, ingresos o nuestros logros. A esta lista se le podrían añadir más y más cosas. Pero la constante insatisfacción tiende a fomentar el desaliento crónico, los trastornos en nuestra vida y hasta la enfermedad.
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