Tal como ocurre con el libro de Proverbios en la Biblia, el libro apócrifo de la Sabiduría de Salomón está escrito como si su autor fuera el rey israelita, famoso por su entendimiento espiritual. El libro está dirigido a los reyes extranjeros, diciéndoles cómo deben administrar su reino. Sin embargo, la mayoría de los eruditos piensan que el mensaje está dirigido, en realidad, al millón o más de judíos que vivieron y fueron perseguidos en Alejandría en la segunda mitad del siglo I a.C. El libro ofrece consuelo a estos judíos y afirma que ellos deberían resistir la atracción de la idolatría pagana y persistir en la antigua ley Mosaica.
Aunque no sabemos con exactitud quién fue el autor de la Sabiduría de Salomón, por el formato de su libro — un largo y complicado discurso poético lleno de erudición y moldeado a estilo filosófico griego — es obvio que se trataba de un judío intelectual profundamente religioso. Estaba bien instruido en el helenismo, pero seguía fiel a las bases de la tradición judía. El creía que los judíos que soportaban persecuciones en esta vida, obtendrían la inmortalidad en la próxima. Por otro lado, los pecadores que oprimieron a los justos — aunque parezcan prosperar en esta vida — enfrentarían un severo juicio en el más allá.
A diferencia de la Sabiduría de Salomón, la Oración de Manasés destaca el perdón misericordioso que Dios concede a los que de manera genuina se han arrepentido de sus transgresiones. A lo largo de quince versos, la oración habla de Manasés, rey de Judá en el siglo VII a.C., a quien la Biblia describe como un monarca malvado que obligó a los judíos a adorar a Baal y mató a los que permanecieron leales a Jehová. De acuerdo con 2 Crónicas. Manasés se arrepintió de sus pecados mientras estuvo en cautividad en Babilonia. Pero cuando él oró con humildad pidiendo perdón, Dios escuchó su petición y lo restauró al trono. La oración apócrifa proporciona lo que el autor imaginó que podrían haber sido las palabras que pronunció Manasés.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!