Jesús tenía muchos discípulos, tanto hombres como mujeres. Muchos eran personas a las que había ayudado, como María Magdalena, de la que había sacado siete demonios. Sin embargo, los Evangelios según Mateo, Marcos y Lucas, y el libro de los Hechos, dicen que había doce discípulos especiales, conocidos como apóstoles, que fueron nombrados para ayudar a diseminar la Palabra de Dios. ¿Has pensado alguna vez lo que hubiera sido ser uno de esos discípulos? ¿Viajar con Jesús y ver sus obras? De los apóstoles podemos aprender mucho sobre cómo hubiera sido conocer a Jesús.
Sin embargo, los Evangelios y el libro de los Hechos no están del todo de acuerdo en quienes eran los doce apóstoles. Una de las razones puede ser que en la época del Nuevo Testamento se hablaban tres idiomas principalmente: griego, arameo y hebreo. Por lo cual, un discípulo podía tener hasta tres nombres diferentes. Todos los relatos sugieren que los apóstoles que eran probablemente más cercanos a Jesús eran Pedro, Juan y Santiago.
De los doce, del que más sabemos es de Pedro. Cuando se encontró con Jesús por primera vez, era conocido como Simeón o Simón Barjona. Simón era un pescador que vivía en Betsaida, un pueblo pesquero sobre el Mar de Galilea. Trabajaba con su padre y su hermano Andrés (otro apóstol). Estaba casado y vivía con su mujer, su suegra y su hermano.
Iniciar sesión para ver esta página
Para tener acceso total a los Heraldos, active una cuenta usando su suscripción impresa del Heraldo ¡o suscríbase hoy a JSH-Online!