Para Mí, tener una relación con alguien significa sentirse muy cómoda con esa persona y querer estar a menudo con ella. También significa contribuir a que dé lo mejor de sí y llegar a conocerla bien.
Cuando comencé la universidad, salí con un muchacho durante diez meses, y todo iba muy bien. Luego las cosas ya no fueron tan bien y comenzamos a distanciarnos. Al final, terminamos insultándonos por correo electrónico. Cuando volví de vacaciones a la facultad, vi que estaba saliendo con otra mujer, y esto me hizo sentir aún más furiosa.
Luego me di cuenta de que no podía dejar que esta relación destruyera mi vida. Traté de verlo como Dios lo veía, como Su hijo perfecto. Esto me calmó y me hizo sentir sinceramente feliz por él, que había encontrado a alguien. Mi ira desapareció. Su novia y yo somos muy amigas, alguien en quien puedo confiar.
Percibí que soy hija de Dios, y que mi alegría no puede ser destruida por el odio o los malos sentimientos.
También me di cuenta de que no está bien idealizar a alguien cuando lo amamos. Uno se encierra en un amor totalmente ciego. Creo que uno puede amar a una persona de la mejor manera cuando la conoce verdaderamente y la aprecia.
Ahora sé que Dios es mi mejor amigo. Está siempre a mano cuando necesito hablarle. Él se hace escuchar con una voz calma que nos dice qué está bien y qué no lo está. Uno puede resolverse a escuchar o no. Pero Él siempre tiene razón.: )